Posibilidades y riesgos de la dimensión utópica de la razón moderna. Aportes críticos de la filosofía latinoamericana actual

FERNÁNDEZ NADAL, ESTELA

La utopía posible: reflexiones y acercamientos, 3 vol (I)

Tecnológico de Monterrey

Lugar: Monterrey; Año: 2013; p. 323 - 349

A pesar del pensamiento "realista" que hegemonizó el espacio teórico durante la década pasada, la reflexión sobre la historia reciente desnuda la pobreza inaceptable de una definición de lo real en términos de pura positividad. En cambio, crece la exigencia de alumbrar lo posible-existente en el presente desde lo imposible-pensado y proyectado en el porvenir. Sin embargo, ese necesario rescate del horizonte utópico debe estar acompañado de una perspectiva crítica frente a la tendencia de la razón moderna a concebir las utopías como modelos de perfección hipostasiados y alcanzables en el tiempo histórico real mediante un proceso de acercamiento progresivo. Esta concepción, deudora de la idea moderna de progreso, se ha hecho acreedora con justicia a la sospecha y al desprecio. Más aún, a la luz de las formas inéditas de barbarie desarrolladas en la historia del siglo XX y lo que va del XXI, esa forma de pensar la utopía y de relacionarnos con ella no puede ya ocultar su índole mítica. Siguiendo a Franz Hinkelammert sostenemos que las utopías, tal como lo entendió Kant, son ideas reguladoras de la razón: constituyen el marco de condiciones de posibilidad de lo posible, pero son en sí mismas incongruentes con cualquier realización social o política efectiva. En la medida en que funcionan como productos de la razón no sometida a crítica, las utopías se convierten en mitos que, tras su apariencia racional, plantean metas históricas facticamente imposibles. Tales metas obliteran la finitud humana y sacrifican lo real en nombre de un ideal inalcanzable y sacralizado. En esta línea se ha desarrollado en nuestra época la utopía del mercado total, que amenaza con someter la vida humana a los imperativos de una lógica instrumental y fragmentaria, que está poniendo en riesgo la continuidad de la especie y la reproducción de la naturaleza. Hoy, para evitar la sacralización del sistema dado, es tan necesario producir una revaloración de la capacidad humana de utopizar como también reformular el concepto de utopía. Proponemos pensarla como una totalidad-ausente, que la finitud humana impide alcanzar, pero que nos invita a reclamar la plenitud y dignidad humanas negadas en cada presente.