Efecto del orujo de uva y su extracto, rico en compuestos bioactivos, sobre la señalización de la insulina en ratas con síndrome metabólico

PERDICARO DJ; MIATELLO RM; RODRIGUEZ LANZI MC; FONTANA AF; VAZQUEZ PRIETO MA; ANTONIOLLI A; BOTTINI R

Mendoza

Jornada; I JORNADA DE INVESTIGACIÓN DEL INSTITUTO DE ENDOCRINOLOGÍA METABOLISMO Y NUTRICIÓN.; 2016

Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Cuyo

En este estudio se evaluó el efecto del orujo de uva (GP) y extracto de orujo de uva (GPE) en tejidos insulino-sensibles (adiposo, hígado y músculo) en un modelo experimental de síndrome metabólico (SM). El SM fue desarrollado en ratas Wistar mediante una dieta alta en grasa y fructosa (HFF). Seis semanas con dieta HFF produjo un aumento del peso, lo cual fue parcialmente atenuado por la suplementación con GP (1g/ por kg de peso corporal/día) y GPE (300mg/por kg pc/día). La dieta HFF aumentó la presión arterial sistólica, los triglicéridos, la insulino resistencia (HOMA: IR) y la inflamación (proteína C-reactiva (PCR)). La suplementación con GP previno el aumento de la PAS, los triglicéridos y la PCR y parcialmente atenuó la resistencia a la insulina. Por otro lado, GPE redujo parcialmente la PAS y triglicéridos y significativamente previno la resistencia a la insulina y la inflamación. Además, la dieta HFF indujo un mayor contenido de triglicéridos y mejoro la actividad NADPH oxidasa en el hígado. También, la dieta HFF aumentó el peso del tejido adiposo epididimal, el tamaño de los adipocitos, y la activación de c-jun quinasa N-terminal (JNK), favoreciendo un estado pro-inflamatorio del tejido adiposo como mayor expresión de resistina y menor expresión de adiponectina. Estas alteraciones pueden modificar la señalización de la cascada de insulina como se observó en el tejido adiposo, en el hígado y en el tejido muscular (IRS1, Akt, y señal extracelular de quinasas reguladoras (ERK1/2)) de ratas HFF. La suplementación con GP y en mayor medida GPE atenuó el contenido de triglicéridos del hígado y la adiposidad y restauró la respuesta a la insulina en el tejido adiposo, en hígado y en músculo. Estos hallazgos muestran que la suplementación con GP y en mayor medida GPE, pueden contrarrestar la adiposidad, la inflamación, los daños en el hígado y el deterioro de la señalización de la insulina asociada al síndrome metabólico, apoyando así la utilización de residuos obtenidos en la elaboración del vino en la industria alimentaria/salud humana debido a su gran cantidad de compuestos bioactivos.