INVESTIGADORES
SCRIBANO Adrian Oscar
capítulos de libros
Título:
¡Vete tristeza... viene con pereza y no me deja pensar!... hacia una sociología del sentimiento de impotencia.
Autor/es:
SCRIBANO, ADRIÁN
Libro:
Contigo Aprendí…Estudios Sociales de las Emociones
Editorial:
CEA-Universidad Nacional de Córdoba. –CUSCH-Universidad de Guadalajara.
Referencias:
Lugar: Cordoba; Año: 2007; p. 21 - 42
Resumen:
Una mañana cualquiera en cualquier ciudad latinoamericana, haga frío o calor, miles de sujetos esperan el transporte público que los lleva a su trabajo. Los minutos pasan, el sueño y la pereza hacen que todo transcurra como en cámara lenta y los cuerpos se amontonan y alinean casi desesperadamente con la amenaza de la posibilidad de ser expulsados de sus empleos por llegar tarde. Un mezcla de impotencia, rabia  y desaliento se apodera de esos rostros enclasados, de esos cuerpos “de a pie”, desnudos en su no poder llegar, de su marca social de siempre “estar-a-la-espera”. Cuando llega el transporte todos se apresuran a subir y el alma vuelve al cuerpo y los días siguen pasando ,así, entre la bronca, el desvelo y la frustración (la sociabilidad se produce y reproduce). Frente a esta pintura de la experiencia emergen muchas preguntas...pero la más obvia de todas las preguntas es ¿por qué toda esa gente soporta la situación descripta?  ¿por qué no reacciona? ¿por qué parece aceptarla sin resistirse?  La sola formulación de la pregunta habilita a subrayar la importancia de una sociología de las emociones en el marco de un intento de explicación de algunas de las situaciones que implica las formas actuales de dominación.  En un marco de expansión imperial, el mundo contemporáneo y en especial Latinoamérica (en tanto que formaciones sociales neo-coloniales) se presentan manejados  estructuras económicas del sistema capitalista. Sin embargo, cuando se comienza un acercamiento progresivo a estas formas sociales de dominación, se encuentran un conjunto de dispositivos de regulación de las sensaciones y mecanismos de soportabildad social cuya tarea es volver natural la expropiación en tanto objeto de la dominación. En una primera aproximación se puede afirmar que estos fenómenos  de aceptabilidad social de lo dado se constituyen a través de una serie de procesos de “cooptación”  de la naturalización del mundo. Uno de los muchos fenómenos que aparecen en el cruce entre soportabilidad social y regulación de las sensaciones es el de la impotencia. En tanto estado de minusvalía del “peso” de la acción autónoma de los sujetos frente a las constricciones de mundo social, la impotencia se constituye y reproduce en la interacción entre el miedo y la mentira. Aquí se pretende mostrar cómo el par social “miedo-mentira” juegan un rol central en la textura eslabonada de esos mecanismos y dispositivos en tanto balances estabilizadores de la coagulación de la acción. Se pretende mostrar que el juego icónico del sentir “miedo-mentira”, al constituirse en el eje del sentimiento de impotencia, opera como sostén de la expropiación y secuestro corporal, de modo tal que elaboran una pintura del mundo donde el capitalismo tiene como línea mas débil justamente sus reversos triunfales El presente trabajo aboga por la re-apropiación de los instrumentos analíticos de la sociología de las emociones como una vía para señalar cuando la sensibilidad social se configura como eslabón de la explotación y cómo esas mismas emociones pueden constituirse en un trampolín para transformaciones radicales. La estructura argumentativa del trabajo es la siguiente: a) se esquematiza la interrelación entre la lógica de la dominación capitalista y la estructuración de las emociones cómo base de la construcción de sensibilidades, b) se describe cómo se constituye la impotencia en tanto consecuencia de los efectos de instauración del miedo y la mentira, c) se presentan algunas narraciones que, tomadas de una investigación empírica, permiten hacer explícitos las tramas conceptuales expuestas y d) se explicitan algunas acciones posibles de reflexividad y emancipación que pueden aparecer en tensión con los fenómenos aludidos. Una advertencia preliminar debe hacerse: las formas sociales de la construcción de las emociones no son “en-sí” dispuestas para la explotación. Lo que se quiere enfatizar aquí es que en la lógica de la estructuración capitalista tiene en la elaboración de las sensibilidades un centro fundamental que naturaliza y “aceptabiliza”  la explotación. Concomitantemente es necesario subrayar que no se piensa a los mecanismos y dispositivos sociales como “manejados” por entes supra-sociales, ni se suscribe a una teoría “conspiracionista” alguna; las  articulaciones entre el sistema de dominación capitalista y los procesos que se describen aquí son el fruto de una construcción social e histórica que obedece a una de las aristas de una de las fases de la estructuración de las condiciones materiales de existencia