El juicio por jurados: más allá del discurso mediático

WECKESSER, CINTIA

Buenos Aires

Jornada; Primeras Jornadas sobre Discursos Sociales, Ideología y Cultura Popular; 2010

Universidad Nacional de La Matanza

En la provincia de Córdoba, desde el año 2005, los delitos calificados por el Código Penal como “gravísimos” y aquellos comprendidos en el Fuero Penal Económico y Anticorrupción Administrativa, son resueltos con jurados populares (Ley 9.182). Esta transformación del sistema procesal penal se enmarcó en una profunda crisis de credibilidad del sistema judicial, muy notorio en la prensa cordobesa del momento, donde se acentuaron las alusiones al deficiente funcionamiento de los aparatos de la justicia para la resolución de numerosos hechos delictivos. En los debates que se hicieron públicos en el espacio mediático, se pusieron en juego distintas representaciones de la justicia, el juicio y fundamentalmente, sobre quién es actor legítimo para juzgar. De este modo, el juicio por jurados fue propuesto desde diversos sectores como la academia, partidos políticos, asociaciones profesionales y cierta “opinión pública”; como el mecanismo que permitiría superar dicha crisis. Podemos considerar que los medios masivos de comunicación (MMC) constituyen el lugar hegemónico en el que las sociedades actuales se narran a sí mismas; por lo que la prensa habría funcionado como una suerte de “caja de resonancia” del conflicto social. Pero el análisis de la producción de significaciones en esta zona compleja debe ser bastante más cuidadoso. Diversos estudios señalan el modo en que las empresas de comunicación definen contenidos exclusivamente en consonancia con sus alianzas, intereses políticos y comerciales. Si bien esta visión también podría relativizarse, cualquier estudio del sentido que procure ser riguroso deberá al menos interrogar la relación con sus condiciones de producción; y queda claro que aquí no estamos refiriéndonos exclusivamente a su relación con otras materias discursivas no mediáticas, eslabones de la cadena del sentido; sino a posiciones sociales, relaciones, disputas, marcos institucionales, intereses en juego y estrategias: esto supone examinar más allá del discurso mediático.