INGEOSUR   20376
INSTITUTO GEOLOGICO DEL SUR
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Nódulos y concreciones de hematita en la Formación Tunas (Pérmico de Sierras Australes, Provincia de Buenos Aires) y su importancia en el análisis paleoambiental
Autor/es:
ARZADUN GUADALUPE; JUAN IGNACIO FALCO; NORA CESARETTI; RENATA TOMEZZOLI
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; Reunion Argentina de Sedimentologia; 2014
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Sedimentología
Resumen:
La Formación Tunas (Harrington, 1947), perteneciente a la parte
superior del Grupo Pillahuincó (Suero, 1972), aflora en el sector este de las
Sierras Australes de la provincia de Buenos Aires, Argentina; desde la Sierra
de las Tunas al norte, hasta la Sierra de Pillahuincó al sur. Litológicamente,
la formación está compuesta por bancos tabulares de areniscas finas de color
verde (facies 1), bancos lenticulares de areniscas medias de color amarillo
(facies 2) y bancos tabulares de fangolitas rojas (facies 3). Se le asigna una
edad pérmica por su contenido paleoflorístico (Harrington, 1947). Andreis
(1979) menciona la presencia de hematita en dicha formación. Zavala et al. (1993) interpretan a la parte
superior de la secuencia aflorante de la Formación Tunas, como correspondiente
a un sistema fluvial.
El objetivo de este trabajo es el estudio y análisis de los nódulos
y concreciones de hematita presentes en la Formación Tunas y su interpretación
en términos de la diagénesis y del paleoambiente. El
término nódulo se utiliza para los
cuerpos irregulares y carentes de estructura, mientras que el término concreción se reserva para formas más
regulares, generalmente se forman por la segregación de componentes minoritarios
de la roca hospedante. Dichas estructuras pueden ser sinsedimentarias,
penecontemporáneas, es decir generadas durante la diagénesis temprana previo a
la compactación del sedimento, o epigenéticas, generadas luego de la
consolidación de la roca hospedante (Pettijhon, 1975).
Se realizaron estudios mediante microscopía óptica, utilizando
un microscopio Nikon eclipse 50i POL y mediante difractometría de rayos X, con un
equipo Rigaku Denki Geigerflex Max III C con monocromador de grafito,
radiación Kα de Cu y velocidad de
barrido de 2° por minuto.
La hematita aparece a lo largo de toda la secuencia en distintas
formas, dentro de las distintas facies:
- La facies 1 contiene
15% de Hm en forma de nódulos y concreciones de color rojizo, de hasta 2cm de
diámetro. La mayoría de las concreciones tienen forma oblada en las localidades
donde aflora la base de la secuencia y esférica
donde aflora el techo. Ocurre también como granos detríticos o como cemento
intergranular (Figuras 1A, B, C y D).
- La facies 2 contiene
11% de Hm, en forma de granos detríticos y como cemento intergranular (Figura 1E).
- La facies 3 contiene
60% de Hm en forma de cemento intergranular (Figura 1F).
Mediante microscopía óptica se observó que todos los nódulos y
concreciones presentan una textura interna masiva y están compuestos por hematita,
normalmente contienen
inclusiones de clastos individuales de cuarzo, feldespato y mica de pequeño
tamaño (20µm; Figura
3). La presencia de Hm pura fue corroborada mediante el método de difracción de
rayos X, observándose el pico máximo en 19.83θ.
Existen varias razones para pensar que los nódulos y concreciones
en la Fm. Tunas se formaron in situ y
tienen un origen diagenético: se encuentran de forma distanciada dentro del
estrato, presentan variedad de formas, ocurren en varias capas y a lo largo de
toda la formación (tanto en las localidades de la base como en las del techo) y
contienen clastos de la misma composición que la roca que los aloja. Por otro
lado, los nódulos y concreciones no atraviesan los planos de estratificación y los
clastos alojados dentro de los mismos no presentan signos de compactación.
Teniendo en cuenta esto se puede inferir que en el momento que la Hm precipitó,
el sedimento tenía una alta porosidad, lo que implica que la misma se produjo
durante una diagénesis temprana (Bowen et
al., 2008; Pettijhon, 1975). El cemento en las facies 3 también pudo
haberse generado por el mismo proceso de precipitación. En cuanto a los clastos
detríticos, estos se habrían depositado de forma mecánica, por acción de las
paleocorrientes. Resulta claro que la precipitación de la Hm se vio favorecida
por la facies de tamaño de grano más fino.
Varios autores (Yoshida et al., 2006; Bowen et al., 2008; entre otros) describen nódulos de hierro de
características similares depositados durante la diagénesis temprana en
ambientes lacustres someros. Para el caso analizado, la facies 1, que es la que
contiene los nódulos y concreciones de hematita, de la Fm. Tunas puede interpretarse la presencia de un cuerpo de
agua asimilable a un lago de características óxicas.
La presencia de grandes
cantidades de Hm en la Formación Tunas puede haber provenido de las facies
volcánicas que se habrían generado durante el Pérmico en el margen
sudoccidental de Gondwana