INGEOSUR   20376
INSTITUTO GEOLOGICO DEL SUR
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Identificación de materiales asbestiformes en la ex Usina General San Martín, Ingeniero White (Prov. de Buenos Aires).
Autor/es:
LESCANO L.; MAIZA P; MARFIL S.
Lugar:
Carlos Paz
Reunión:
Congreso; 10º Simposio de Geología Aplicada a la Ingeniería y al Ambiente.; 2012
Institución organizadora:
ASAGAI
Resumen:
Asbesto es un término comercial que involucra a un grupo de silicatos (serpentina: crisotilo y anfíboles: crocidolita, amosita, antofilita, actinolita y tremolita), de hábito fibroso, flexible, resistente a la tracción y al calor, al fuego y a la degradación química o biológica (Zoltai, 1981). Los múltiples estudios sobre asbestos están relacionados, principalmente, con la morfología, composición, tamaño y a las implicancias para la salud humana. Estos factores son los que determinan la posibilidad de penetración de las fibras de amianto en las vías respiratorias las que se acumulan en los pulmones, pudiendo desarrollar cáncer o asbestosis (Battista, et al. 2006). En Argentina, los asbestos se encuentran prohibidos según la resolución del Ministerio de Salud N° 845/00 que dice: "Se prohíbe la producción, importación, comercialización y uso de fibras de asbestos variedad anfíboles, y productos que las contengan", a partir del 10 de octubre de 2000 y la resolución del Ministerio de Salud N° 823/01, que dice "Se prohíbe la producción, importación, comercialización y uso de fibras de asbestos variedad crisotilo, y productos que las contengan", a partir del 1º de enero de 2003 (Rodríguez, 2004). Si bien estas resoluciones siguen vigentes en la actualidad, las medidas adoptadas en nuestro país consisten en retirar del mercado los productos que contienen asbesto, reubicarlos y reemplazarlos por otros materiales. La ex usina general San Martín también llamada "La usina del castillo", fue construida con la idea de ser una "súper usina" que proveería de energía eléctrica a la ciudad de Bahía Blanca. El predio se ubica en la localidad de Ing. White, partido de Bahía Blanca, en la Provincia de Buenos Aires, Argentina. Al lugar se llega por la ruta nacional 252, en la zona portuaria de Ing. White. La Compañía Italo Argentina de Electricidad adquirió las instalaciones el 1 de diciembre de 1927 y, con la anuencia de municipio, continuaron con las respectivas concesiones, bajo el nombre de Eléctricas de Bahía Blanca S.A. En 1929 comenzaron las tareas de relleno de superficie con material obtenido del dragado de la ría de Bahía Blanca. A principio de 1932, se iniciaron las primeras pruebas preliminares de la usina y el 1 de octubre de ese mismo año se puso en marcha y fue liberada al servicio. La usina fue desafectada de sus servicios en el año 1987, y el desguace de la misma comenzó en 1997. Su arquitectura, de estilo románico-lombardo con reminiscencias de castillos de la época medieval (Figura 1), muestra deterioros significativos en su interior, sin embargo esos aspectos no son los prioritarios. El principal interés ambiental dentro de este edificio es la presencia de materiales asbestiformes, en diferentes partes de la construcción. Esto obstaculiza su habilitación al público y deberán tomarse medidas precautorias al momento de la puesta en valor. Por esta razón, el inmueble, declarado Monumento Histórico Nacional, se encuentra actualmente en desuso. Fue cedido a la Municipalidad de Bahía Blanca en el año 2001, quien considera prioritario resolver la problemática de contaminación con asbestos. El ingreso a varios sectores, además está vedado, por el riesgo de derrumbe de mampostería. Se localiza en un sector densamente poblado, negativo a efectos ambientales debido que las fibras de asbestos al ser livianas y microscópicas se esparcen fácilmente por largas distancias, pudiendo afectar a los centros poblados (Figura 2). Con el objeto de determinar los materiales que contienen asbestos, se tomaron muestras del piso (baldosas y alisado de cemento), paredes, columnas, bloques caídos de los techos (fibrocemento) y tuberías. Para la identificación y caracterización del tipo de los minerales asbestiformes, se separaron de las muestras utilizando estereomicroscopio y se estudiaron con microscopio petrográfico, sobre grano suelto y por difractometría de rayos X. Fragmentos de las placas de fibrocemento, (onduladas y rectas), se encuentran dispersas en el suelo de la usina, resultado del desprendimiento de parte del techo de la estructura. El fibrocemento es un material constituido por una mezcla de cemento y asbestos como fibras de refuerzo. Estos últimos, se utilizaban por su elevada resistencia mecánica, en una proporción de hasta un 25%. Con microscopio petrográfico se observaron fibras rizadas, muy finas y extensas (Figura 3), de extinción recta y ondulosa. Se reconoce su alta resistencia y flexibilidad, principal característica de los minerales asbestiformes. Por sus propiedades ópticas se determinó como crisotilo. Por difractometría de rayos X se identificó cuarzo (Q), yeso (Y) y feldespato (Fl). Además se confirmó claramente la estructura del crisotilo con sus máximas reflexiones en 7,32; 3,66 y 2,45 Ǻ, comparables con la ficha ICDD 31-808 (ICDD, 1986) (Figura 4). Los materiales refractarios son aquellos capaces de resistir altas temperaturas sin fundirse, presentando características tales como: ser buen aislante térmico y eléctrico, soportar los cambios bruscos de temperatura, resistencia a la compresión, conductividad térmica y eléctrica, entre otras. Se estudiaron columnas de los sectores donde se encontraban los generadores de la usina varias de ellas recubiertas por materiales refractarios. Macroscópicamente no se observaron materiales fibrosos asbestiformes. Por difractometría de rayos X, se reconocieron las reflexiones adjudicables a cuarzo, tridimita y mullita. Este último es un aluminosilicato, formado por calcinación de las arcillas en la industria de la cerámica y en materiales de alta resistencia al impacto térmico. Al microscopio no se identificaron minerales asbestiformes en el recubrimiento de columnas. Se muestrearon diferentes capas del revoque de las columnas: grueso, fino y pintura exterior. El revoque grueso, en contacto con el hormigón, está bien cementado, constituido por cuarzo, rocas volcánicas y conchillas. En la superficie de las columnas, (sobre el revoque fino) se obtuvieron muestras de una pintura de color negro, probablemente asfáltica, con abundante material fibroso. A partir de este estudio se concluyó que no todos los materiales a remover contienen minerales perjudiciales para la salud ya que los asbestos sólo se hallaron en fibrocementos, la pintura asfáltica y como recubrimiento de tubos de drenaje de agua para refrigeración de turbinas, distribuido puntualmente con ubicuidad clara.