CICTERRA   20351
CENTRO DE INVESTIGACIONES EN CIENCIAS DE LA TIERRA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Caracterización petrológica de las milonitas de ortogneises tonalíticos-graníticos de la faja de cizalla Las Lajas, extremo Sur de la Sierra de Comechingones, Córdoba-San Luis
Autor/es:
CRISTOFOLINI, E.; MARTINO, R. D.; OTAMENDI, J.; TIBALDI, A.; ARMAS, P.; BARZOLA, M.; ZAMBRONI, N.
Lugar:
General Roca
Reunión:
Simposio; 3° Simposio sobre Petrología Ígnea y Metalogénesis Asociada; 2015
Institución organizadora:
Comisión de Petrología de la Asociación Geológica Argentina (ComPetro)-Instituto de Investigación en Paleobiología y Geología de la Universidad Nacional de Río Negro
Resumen:
El extremo austral de la Sierra de Comechingones expone un basamento cristalino conformado por dos complejos lito-estratigráficos (complejo Achiras y Monte Guazú), que representan la evolución de los sistemas orogénicos Pampeano y Famatiniano (Otamendi et al. 2000). Dichos complejos metamórficos polideformados exhiben historias evolutivas contrastadas, evidenciadas en las paragénesis minerales y estructuras de sus principales unidades litológicas (Otamendi et al. 2000). El complejo Monte Guazú representa la entidad geológica de mayor extensión areal y está conformado por ortogneises tonalíticos y de manera subordinada ortogneises graníticos, granodioríticos y gábricos. Además, la secuencia también se constituye de metamorfitas paraderivadas dominadas por gneises, esquistos, mármoles y anfibolitas, todas estabilizadas en facies de anfibolita (Otamendi et al. 2000). Por su parte, el complejo Achiras presenta una geología que comprende dos unidades litológicas: 1) la unidad metamorfitas y granitos India Muerta, que incluye esquistos biotíticos, diatexitas, escasos mármoles, anfibolitas y diques de leucogranitos; y 2) la unidad granitoides de Los Nogales, Sierra Grande y El Potrero, que abarcan monzogranitos, sienogranitos, monzonitas, y expresiones subordinadas de tonalitas, dioritas y leucogranitos. Ambas unidades evidencian que dicho complejo evolucionó en condiciones metamórficas de facies de anfibolita alta, con desarrollo de anatexis generalizada (Otamendi et al. 2000). Poniendo en contacto tectónico y afectando de manera diferencial a los complejos Achiras y Monte Guazú, se desarrolla una estrecha zona de deformación localizada denominada faja de cizalla Las Lajas (Stuart-Smith y Skirrow 1997, Otamendi et al. 2000). La misma se extiende por más de 20 km con tendencia NO-SE, con un ancho variable de hasta 1,5 km y buzamiento dominante al NE. Presenta límites transicionales al Este afectando de manera localizada a los ortogneises y metamorfitas paradeivadas Monte Guazú; y muestra límites netos coincidente con un fallamiento frágil (falla Las Lajas) al Suroeste, retrabajando en parte a las secuencias del complejo Achiras. La faja de cizalla Las Lajas (s.s.) esta conformada por milonitas-ultramilonitas y esquistos miloníticos de paragneises, esquistos, anfibolitas y mármoles. Todas las paragénesis de las milonitas mencionadas se estabilizaron en la facies de esquistos verdes, con la coexistencia de Ms+Chl+Bt±Ser; Tr/Act±Hbl±Pl y Fo+Di+Tr+Fl+Cc+Dol.Dentro de la faja de cizalla Las Lajas se generan también milonitas (s.l.) de protolitos ortoderivados (ortogneis tonalítico-granítico). Haciendo un análisis minucioso de estas rocas, se puede observar que se desarrollan en estrechas fajas de 50 m a 200 m de potencia y extensión superior al kilómetro. Las mismas se definen de manera inequívoca en inmediaciones del puesto El Potrero, en el límite sureste de la faja Las Lajas, donde se nuclean en la zona de contacto transicional entre ortogneises tonalíticos-graníticos y paragneises cuarzo-feldespáticos. En afloramiento se presentan como tabiques de morfología subangulosa a angulosa, mostrando una coloración gris ocre a blanquecina. En algunos casos afloran a modo de cuerpos lenticulares, aplastados y elongados con su eje mayor orientado NO-SE. De manera generalizada todas las milonitas (s.l.) exhiben una foliación anastomosada milonítica, que se acentúa en algunos casos adquiriendo un aspecto filítico, con tonalidades ocres y brillo satinado sobre los planos de foliación. Dicha fábrica planar posee una orientación regular de rumbo N 350° a N 10° y un buzamiento > 50° al E. Además, estas rocas, presentan un tamaño de grano fino, destacándose ¨ojos¨ elipsoidales de mircroclino y/o plagioclasa (andesina), cuyo eje mayor se orienta paralelo a la lineación mineral definida por micas (Ms-Bt) y cuarzo, yaciendo ambos rasgos sobre el plano de la mencionada foliación. Dicha lineación mineral se orienta entre N 85º a N 115º, con inmersión entre 45° y 60° al E. Las milonitas (s.l.) de ortogneises tonalíticos-graníticos muestran una matriz granolepidoblástica de grano fino (< 0,5 mm) y una esquistosidad milonítica típica. La matriz es rica en cuarzo-plagioclasa y de manera subordinada presenta muscovita, clorita, biotita, sericita, circón, apatita y opacos. En ocasiones se aprecia esfena y epidoto. El cuarzo se presenta como cristales aislados asociados a plagioclasa, con hábito ameboidal y extinción en lamelas. Además, conforma ribbons (< 1 mm) que se curvan alrededor de los porfiroclastos, constituidos por cristales pequeños de habito rectangular (euhedral) que muestran extinción normal. La plagioclasa está como blastos pequeños, subhedros, con maclado polisintético e inclusiones de circón y opacos. Las micas se presentan en folias finas anastomosadas, como laminillas subhedras y con clivaje flexurado. En ocasiones muestras formas de ?pez?, bordes desflecados y pliegues kink. El circón, apatita y opacos conforman individuos pequeños subhedrales, localmente redondeados y estirados, dispuestos armónicos con la matriz. El epidoto es escaso, presentándose en cristales finos, prismáticos y subhedros, asociados en bandas de fluxión a biotitas. La esfena aparece como agregados granulares finos y anhedros. Los porfiroclastos son de tamaño variable (< 3 mm) y se componen de plagioclasa, microclino y agregados poliminerales de plagioclasa-cuarzo. Todos muestran morfologías de tipo sigma, delta y complejas, con desarrollo variable de colas asimétricas. Siempre incluyen micas, circón y apatita. La plagioclasa es subhedra, con maclado polisintético acuñado-curvo y carlsbad. En ocasiones muestra recristalización a subgranos en sus bordes, texturas de manto-núcleo y zonado ígneo. El microclino presenta forma ovoidal en cristales anhedros y recristalización perigranular. También presentan extinción ondulosa, maclas en enrejado curvas-acuñadas y en ocasiones están desgarrados por tracción con intrusión de matriz en su interior. La paragénesis Ms+Chl+Bt±Ser+Qtz+Pl, definida en estas rocas, indica que las mismas se estabilizaron en facies de esquistos verdes, coincidiendo con lo relevado en otras unidades miloníticas desarrolladas en la faja. Asimismo, el conjunto de indicadores cinemáticos vinculados con la microfábrica de las milonitas (s.l.) de ortogneises, revelan a la faja Las Lajas como una zona de cizalla dúctil no coaxial, de cinemática inversa con movimiento al oeste-noroeste y componente sinistral subordinada. A modo de corolario y basados en evidencias petrológicas-estructurales se concluye que la faja de cizalla Las Lajas es una discontinuidad a nivel cortical muy importante, y representa un límite tectónico local que acomodó el acortamiento orogénico de todo el Paleozoico, provocando el corrimiento de las secuencias del complejo Monte Guazú sobre las del complejo Achiras.