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En el suroeste de la Provincia de Córdoba, asoman varios ?cerros testigos? que sobresalen del relieve circundante relativamente plano de la región. Los mismos han sido considerados relictos erosivos del volcanismo basáltico ligado con la extensión cretácica, sin embargo conforman volcancitos monogénicos bastante más jóvenes. Uno de ellos, al oeste de Chaján, constituye una geoforma seudocónica de aproximadamente 40m de relieve y 200m de diámetro, conocido como cerro La Leoncita. Una revisión del mismo permite sugerir un SIG que expone gran parte de la historia geológica de la región. Si bien la unidad más conocida del cerro es un basalto (basanita con xenolitos de lerzolitas granatíferas), lo interesante es que sus laderas norte y noroeste están cubiertas de mantos tabulares y capas gradadas de escorias vesiculadas, tefras lapillíticas y aglomerados y brechas volcánicas buzantes con alto ángulo y dispuestas a manera de delantal, en sentido radial centrífugo. Esta disposición de ?facies escoriáceas? dominadas por mecanismos gravitacionales y de caída, superpuestos, permite interpretarlo como un cono de lavas y escoria monogénico, posiblemente representando un único evento de volcanismo basáltico de vida corta y relativamente violento. Dataciones K?Ar recientes arrojaron una edad de 67.5±2.7 Ma (Lucassen et al. 2002), indicando su proximidad al límite K-T. A diferencia de estos, los episodios del Cretácico intercalan con unidades sedimentarias detríticas, constituyendo rellenos volcano-sedimentarios en sistemas de grábenes. El conjunto volcánico se encuentra sobrecorrido por falla inversa vergente al SE sobre una unidad sedimentaria presumiblemente carbonífera-pérmica que, a su vez, apoya sobre un basamento granítico.