Bases biológicas para la conservación de crustáceos marinos con importancia comercial.

GUSTAVO ALEJANDRO LOVRICH; TAPELLA, FEDERICO; PATRICIA PEREZBARROS,; ROMERO, MC

Buenos Aires

Workshop; Plenario Proyecto PNUD ARG/02/018 - FMAM/BIRF 28385-AR"Conservación de la Diversidad Biologica Marina y Prevención de la Contaminación en Patagonia" Subcomponente 2.3 Subproyectos Competitivos de Innovación Tecnológica e Investigación Aplicada; 2007

&lt;!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:612.0pt 792.0pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:36.0pt; mso-footer-margin:36.0pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} --&gt; La pesquería de crustáceos del Canal Beagle evidencia signos de sobreexplotación. Durante este proyecto desarrollamos técnicas que permitieron obtener primeros estadios bentónicos de centolla Lithodes santolla, como un primer paso hacia el subsidio poblacional. Localizamos a los primeros estadios bentónicos que se asientan en colectores tridimensionales a <40 m de profundidad. Encontramos que el estadio megalopa puede elegir el sustrato donde asentarse dentro de las primeras 48 h, que elige sustratos del tipo conchilla y/o rocas, y son relativamente fieles a estos sustratos que brindarían refugio. Un problema en la calidad del transporte de la centolla y centollón es la exposición al aire que sufren los ejemplares pescados hasta su llegada a la planta procesadora. Los machos de talla legal de Paralomis granulosa activan su batería antioxidante durante las primeras 6 h de exposición aérea y luego esta actividad decae. En América del Sur Munida subrugosa y M. gregaria aparentemente serían la misma especie porque: (i) son genéticamente idénticas, (ii) no existen barreras de aislamiento precigóticas (apareamiento), ni postcigóticas (supervivencia de las larvas), y (iii) no existiría una diferenciación en el nicho trófico que pueda derivar en un aislamiento reproductivo. Consecuentemente decidimos denominarlas “morfoespecies” y su manejo en potenciales extracciones comerciales deberán considerarlas como tales.