INVESTIGADORES
MARCOVECCHIO Jorge Eduardo
capítulos de libros
Título:
Programas de monitoreo en estuarios: estudios a largo plazo
Autor/es:
JORGE MARCOVECCHIO; HUGO FREIJE,; SANDRA BOTTE; CARLA SPETTER; ANDRES ARIAS; MELISA FERNANDEZ SEVERINI; NATALIA BUZZI; SILVIA DE MARCO; VANESA NEGRIN; PIA SIMONETTI; VALERIA GUINDER; CECILIA POPOVICH; MARCELO PEREYRA
Libro:
Procesos Químicos en Estuarios
Editorial:
Editorial de la Universidad Tecnologica Nacional (EdiUTecNe)
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2013; p. 292 - 312
Resumen:
Se llama ?monitoreo? a un sistema contínuo de observación y control de medidas y evaluaciones para un propósito definido. El monitoreo es una herramienta importante en el proceso de evaluación de impactos, y en cualquier programa de seguimiento y control (Sors, 1987). Actualmente existe un fuerte consenso sobre que el monitoreo ambiental no es un fin en sí mismo, sino un paso esencial en los procesos de administración del ambiente (Stelzenmüller et al., 2013). Teniendo en cuenta los conceptos previamente mencionados, se puede observar la importancia que actualmente tiene el monitoreo en los diversos procesos de la actividad humana. Además, y tal como acertadamente se menciona, es una herramienta fundamental dentro de todo aquel desarrollo o procedimiento que se desee llevar a cabo de manera controlada y segura (Collins et al., 2012). El monitoreo no es una actividad independiente, sino más bien una parte de un proceso más amplio que puede estar científicamente orientado a la conservación o la gestión (Nichols y Williams, 2006). El paradigma dominante sobre el que se basa la ciencia del monitoreo es la evaluación de los cambios en las variables ambientales seleccionadas entre tratamientos y áreas de control, así como su evolución en el tiempo tras la aplicación de un régimen de gestión (Tulloch et al., 2011). Los programas de monitoreo consisten en realizar una vigilancia permanente de un sistema natural, controlando el estado y evolución de sus variables, cuantificando las variaciones que se producen, e identificando los motivos que las generaron. Hay diferentes estrategias de trabajo, tanto espaciales como temporales, y pueden desarrollarse exclusivamente en base a datos de campo, en base a datos experimentales, o combinando ambos. Cuando estos programas se llevan a cabo por plazos prolongados (por ejemplo, decadales), el conjunto de información que van proveyendo constituye una base sólida sobre la cual es posible caracterizar con precisión la estructura y funcionamiento del sistema bajo estudio. Siempre y cuando se mantenga la continuidad del monitoreo, se puede sostener que a medida que el programa tiene más antigüedad (por lo tanto más cantidad de información) es más sencillo identificar una anomalía o variación significativa en alguno de los parámetros estudiados, teniendo en cuenta que la distribución de valores ?normales? será muy densa, y por lo tanto los que se alejen de ese modelo serán fácilmente distinguibles.