IMHICIHU   13380
INSTITUTO MULTIDISCIPLINARIO DE HISTORIA Y CIENCIAS HUMANAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Historia e Historiografía: los Períodos Intermedios en la periodización del Egipto dinástico
Autor/es:
FLAMMINI, ROXANA
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Encuentro; II Encuentro sobre Antigüedad Tardía y Mundo Clásico: Pensadores y Polemistas; 2017
Institución organizadora:
Facultad de Filosofía y Letras-Universidad Nacional de Cuyo
Resumen:
Como puede observarse en cualquier manual de la especialidad, la historiografía dividió la prolongada historia del Egipto dinástico en períodos bien diferenciados en torno a la ?unidad? o ?colapso? del Estado. Así, si tomamos como punto de partida su emergencia sobre fines del IV milenio a.C., la secuencia está conformada por el Dinástico Temprano, el Reino Antiguo, el Primer Período Intermedio (III milenio a.C.); el Reino Medio, el Segundo Período Intermedio y el Reino Nuevo (II milenio a.C.) y el Tercer Período Intermedio y la Baja Época (I milenio a.C.). Como es fácil advertir, la secuencia enfatiza los períodos de unificación al distinguirlos entre sí con los adjetivos Antiguo, Medio y Nuevo, dejando en medio de ellos, precisamente, a los Períodos Intermedios, distinguidos únicamente por una calificación numérica ordinal (Primero, Segundo y Tercero). Esta simple observación revela que el énfasis estuvo puesto, al menos en el momento de la generación de esta periodización, en los momentos en que el Estado estaba concentrado en manos de una realeza que gozaba de la suficiente legitimidad como para mantener la cohesión interna. No es casualidad que tal periodización haya emergido en el siglo XIX en Europa, que vio nacer y consolidar el paradigma de la Modernidad, con sus pilares basados en los conceptos de orden y progreso y en los ?estados-nación?. Es así que esa imagen del Estado egipcio unificado es la que se transformó, a su vez, en paradigma canonizado de la incipiente Egiptología, contra el cual se contrastó el devenir histórico de esa sociedad. De este modo, todo proceso que no se ajustara a tal paradigma resultaba pasible de ser considerado corte y desviación de lo que ?verdaderamente? era el antiguo Egipto. De este modo, propongo en esta comunicación revisar las cuestiones antedichas a la luz de la evidencia de la que disponemos hoy en día para los ?períodos intermedios?; trazar continuidades y rupturas y rescatar la singularidad de tales procesos históricos.