Diálogos entre la Arqueología Histórica y los estudios poscoloniales

BUSCAGLIA, S.

Buenos Aires

Congreso; 1° Congreso de Estudios Poscoloniales y II° Jornadas de Feminismo Poscolonial. Cruzando Puentes: Legados, genealogías y memorias poscoloniales.; 2012

IADES/UNSAM, ANPCyT y CLACSO

La Arqueología Histórica como especialidad de la Arqueología tiene un origen relativamente reciente -década de 1960- y se originó principalmente en Estados Unidos e Inglaterra, con una especificidad metodológica basada en la articulación de la cultura material y los documentos históricos. Desde el mundo anglosajón se la definió como la arqueología interesada por la conformación del mundo moderno caracterizado por una economía única, colonial, internacional y en expansión. Sin embargo, y sobre todo desde Latinoamérica, en los últimos años han surgido críticas en relación a estas perspectivas globalizantes, unidireccionales, homogeneizantes y eurocentristas para dar cuenta de la expansión de la sociedad moderna. La diferencia radica fundamentalmente en la necesidad de atender a las particularidades de los contextos locales –pero sin perder la perspectiva comparativa-, la heterogeneidad de actores, prácticas y procesos involucrados con el fin de establecer las trayectorias diferenciales del proceso de constitución de lo que denomina la sociedad moderna. En base a estas perspectivas, este trabajo se propone discutir los aportes de la Teoría Poscolonial en función del abordaje de las problemáticas histórico-arqueológicas vinculadas al colonialismo en Latinoamérica. De este modo, se enfatizará el análisis crítico del poder, los discursos, las prácticas y las materialidades emergentes como resultado de los encuentros e interacciones generados por el colonialismo. En este sentido, la Arqueología Histórica se constituye en un campo privilegiado para trabajar y discutir críticamente el colonialismo a partir de la relación dialéctica entre la documentación histórica y la dimensión material de las prácticas cotidianas, tanto de los agentes del colonialismo como de aquellos que fueron subalternizados por el mismo. Esta perspectiva implica atender por lo tanto a la singularidad de los contextos y agentes que hacen a genealogía y diversidad de nuestras sociedades y sus prácticas.