Migraciones internacionales desde la perspectiva transnacional

SUSANA MARÍA SASSONE

Boletin de GAEA Sociedad Argentina de Estudios Geográficos

GAEA Sociedad Argentina de Estudios Geográficos

Lugar: Buenos Aires; Año: 2007 p. 93 - 107

Los incesantes flujos de personas en busca de trabajo, escapando del desempleo y hasta de la pobreza más flagrante, están en la preocupación de todos los gobiernos de los países desarrollados y de los países emergentes. La migración es, a la vez, drama contemporáneo de la humanidad y opción para el desarrollo. Nuestro artículo contribuye a delinear una aproximación conceptual de la migración transnacional, que solo es posible en el contexto de la globalización. Sobre esta modalidad emergente existen también otras denominaciones como espacio social transnacional o comunidades migrantes transnacionales, territorios transnacionales. Las investigaciones que centraban el análisis de las migraciones internacionales en la sociedad receptora fueron las que dieron origen a la perspectiva transnacional que surgió en Estados Unidos. Primero, nos referiremos a dos casos muy vigentes en la realidad cotidiana (los latinoamericanos en Europa y la diáspora china)  para luego proponer un modelo analítico de la migración transnacional desde la preceptiva geográfica. En nuestra propuesta de modelización, se considera que la migración transnacional está basada en un sistema multipolar, dentro del cual, en los nodos se produce la fijación espacial (anclaje territorial) y esos nodos se vinculan por los flujos (migrantes, información, remesas). Así se conforman territorios en red o territorios reticulares, para hablar entonces de una multiterritorialidad. Esa experiencia del espacio, hecha de movilidades responde a dos lógicas: de territorialización y de circulación. Ya no hay procesos migratorios unidireccionales, ahora son multidireccionales; juegan, a la vez, en varios territorios y están relacionados; se ha pasado de procesos bipolares, propios del siglo XIX, a procesos interpolares para llegar con la globalización a la multipolaridad. Este sistema es afectado, también, la temporalidad pues ya no se advierte en la migración esa intencionalidad hacia un cambio de residencia permanente.  Las lógicas espaciales de la migración transnacional son reconstruidas al analizar elementos y significados particulares en la vida cotidiana de los migrantes y sus familias a lo largo de su historia migratoria. Desde la óptica de este tipo de migrante se pueden encontrar tres situaciones que evidencian claramente cómo se configura los flujos en el transnacionalismo desde abajo: la información personal entre quienes van y vienen al país de origen, las remesas y la comunicación vía Internet. Esto sin considerar otras prácticas de movilidad espacial, en las cuales la circularidad, las idas y vueltas, los retornos, son aspectos de amplio interés para las investigaciones en el campo de las ciencias sociales. Los países de inmigración deben reconocer la diversidad cultural de sus sociedades que provoca el transnacionalismo. Y más aun. Multiculturalismo, pluralismo cultural, interculturalidad, integración cultural son las distintas formas de aceptar las diferencias de orígenes en las “sociedades nacionales” que pueden pasar a ser “sociedades multiculturales”. Tal vez, la mejor caja de resonancia de este multiculturalismo en ciernes y creciente lo sea la escuela, formadora de ciudadanos. Hay un desafío muy comprometido para los gobernantes, los técnicos, y los docentes y también para todos los ciudadanos. ºISSN 03252698