INSUGEO   12554
INSTITUTO SUPERIOR DE CORRELACION GEOLOGICA
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Regiones hidrogeológicas de Tucumán
Autor/es:
RODRÍGUEZ, GRACIELA; GARCIA, JORGE; D´URSO, CARLOS; FALCÓN, CARLOS
Libro:
Relatorio Ciencias de la Tierra y Recursos Naturales del NOA
Editorial:
Comité Permanente de los Congresos Geológicos Argentinos
Referencias:
Lugar: San Miguel de Tucumán; Año: 2017; p. 1107 - 1127
Resumen:
En Tucumán el agua subterránea representa la principal fuente de abastecimiento para uso doméstico, agrícola e industrial. Los procesos geológicos que actuaron durante el Cenozoico modificaron profundamente la morfología de la región. El paisaje de grandes llanuras que predominó durante el Neógeno se modificó de manera importante desde el inicio de los movimientos Ándicos, delineando un relieve que caracteriza al período Cuaternario, con la elevación de cordones serranos limitados por fallas. La presencia de estas barreras ocasionó importantes cambios climáticos, que originaron una mayor pluviosidad y la formación de una densa red hidrográfica que drenó las serranías tucumanas, rellenando los valles con depósitos clásticos durante el Plioceno y Cuaternario. Se formaron así seis regiones hidrogeológicas que forman parte de la provincia de Tucumán. La llanura oriental tucumana, con las regiones del valle del río Salí al sur y la llanura de Burruyacu al norte, con importantes reservorios de aguas subterráneas, aguas termales y surgencia natural hacia Santiago del Estero. Los valles del Tafí y de Santa María, pertenecientes a los Valles Calchaquíes o valles intermontanos de Sierras Pampeanas, caracterizada por su escasas precipitaciones pero con excelentes reservorios desarrollados en sedimentos permeables que rellenan el valle. El valle de Choromoro o de Tapia-Trancas pertenece a los valles intermontanos del Sistema de Santa Bárbara, con un control tectónico que lo limita y precipitaciones del orden de los 500 mm anuales. Se destaca una importante red de drenaje, que confluye en el colector principal, el río Salí. Los valles de Burruyacu pertenecen a los valles intermontanos del Sistema de Santa Bárbara y se caracterizan por estar fuertemente controlados por la estructura y por presentar precipitaciones anuales del orden de los 600 a 800 mm. Se divide en tres valles: de Medina que desagua al río Salí y de los ríos Nío y Chorrillos que drenan a la llanura de Burruyacu.