El olor maternal modula los comportamientos de ingesta en ratas neonatas e infantes.

SUAREZ, A.; KAMENETZKY, G.; IFRÁN, MARÍA C.

C.A.B.A.

Jornada; Jornadas Científicas del Instituto de Investigaciones Médicas Alfredo Lanari.; 2018

IDIM - CONICET - UBA

Introducción: El olfato es imprescindible para la supervivencia de los mamíferos, especialmente durante las primeras etapas de la vida. Los olores familiares les permiten a las crías localizar al nido y mantener la cercanía con el cuidador. Sin embargo, hay escasa literatura de cómo los olores aprendidos impactan sobre el consumo de alimentos en edades tempranas de la ontogenia. Estudios previos de nuestro laboratorio mostraron que ratas neonatas que eran pre-expuestas al olor a limón durante una hora (sin pre-exposición para el grupo control), incrementaron las respuestas de ingesta hacia un pezón artificial que dispensaba quinina (solución aversiva por su amargura, y usualmente rechazada).Hipótesis u objetivo: El objetivo de estos experimentos fue evaluar si la pre-exposición a un estímulo biológicamente relevante, como el olor a madre, exacerban las conductas de ingesta hacia la quinina.Diseño del estudio: Se utilizaron 34 ratas Wistar de 3 días de vida (DPN) para el experimento 1, y 62 de 12 días de vida respectivamente, para el experimento 2. En el experimento 1, las ratas permanecieron con la madre hasta el DPN 3, cuando fueron evaluados en presencia del olor materno o no, con un pezón artificial que contenía quinina. En el experimento 2, los animales fueron mantenidos con la madre hasta el DPN 12, cuando fueron evaluados en presencia de su propia u otra madre, con una bomba de infusión que dispensaba quinina o agua.Resultados avalados por valoraciones estadísticas: Los resultados para el experimento 1 indicaron un aumento de las conductas de ingesta de quinina (incremento del porcentaje de ganancia de peso [F(1,32) = 4.98, p < 0.03], el tiempo total de agarre al pezón artificial [F(1,32) = 6.58, p < 0.01]) y una disminución de la latencia hacia la primera respuesta de agarre al pezón artificial [F(1,32) = 4.53, p < 0.04]. Los resultados sugieren que el olor materno facilita la aceptación de soluciones aversivas, habitualmente rechazadas.