INBA   12521
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN BIOCIENCIAS AGRICOLAS Y AMBIENTALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Suelo y fertilidad en la conducción del cultivo
Autor/es:
DIAZ ZORITA, MARTIN
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; ASAGIR 2010. 5to Congreso Argentino de Girasol: con la mirada en la competitividad; 2010
Institución organizadora:
ASAGIR
Resumen:
Para abordar la temática de la nutrición del cultivo y su vinculación con el suelo, el objetivo de esta presentación es mostrar hacia dónde se está avanzando en cuanto al conocimiento del suelo para tomar decisiones, en la conducción del cultivo, y hacia dónde se va en materia de fertilidad y fertilización. Hace algunos años nos preguntábamos cuál era la necesidad nutricional del cultivo en el marco actual de producción. Hoy ya se pueden encontrar resultados integrados que permiten entender la contribución del manejo de la nutrición dentro del cultivo, algunos comentarios sobre los avances en la nutrición con fósforo, nitrógeno u otros nutrientes y otros desarrollos que permiten estar al tanto de lo que viene y del estado actual. A modo de resumen, se destacan tres elementos de importancia en primer lugar, no podemos olvidar que la nutrición, principalmente con nitrógeno y con fósforo, muestra evidencias de frecuentes limitaciones a la producción en las áreas girasoleras de la Argentina. En segundo lugar, las respuestas alcanzables rondan, para quienes hacemos números para tomar decisiones empresariales, aproximadamente el 10%. La pregunta es ¿el 10% de qué?, porque para pensar en términos de rendimientos alcanzables tenemos que empezar por conocer el sitio. No es lo mismo el 10% de un lote con pH 9 que un 10% de un lote profundo de pH 6, con 4% de materia orgánica y buena cobertura. No olvidemos que el rendimiento alcanzable se va recortando proporcionalmente por los factores que lo limitan. En el caso del fósforo, es importante realizar análisis del suelo, y no dejarlo de lado aún si contamos con buenos niveles de análisis del suelo para siembras tempranas, con buenas coberturas y suelos consolidados, porque tenemos que ayudar a las raíces a colonizar el espacio. Cuidemos también la toxicidad en la siembra. En cuanto al nitrógeno, no se analiza el suelo para tomar decisiones, sino que es un análisis integral, que empieza en el suelo, sigue por la planta y debe incorporar al manejo del cultivo. Es importante también pensar en fechas de siembra, antecesor y densidad de plantas logradas no sembradas. Y estar atentos a los nuevos desarrollos, como la incorporación del azufre y del boro a los sistemas actuales de producción. Hubo grandes cambios que nos obligan a estar atentos, como los promotores biológicos de crecimiento, ya que hay mucho interés en mejorar la condición inicial de crecimiento del cultivo en forma integral.