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En los últimos años el creciente interés científico ligado al conocimiento y aplicaciones del constructo Inteligencia Emocional se ha enfocado principalmente en el contexto educativo, teniendo en cuenta los efectos que una adecuada percepción, regulación y expresión emocional puede tener sobre los estudiantes. En el presente trabajo se analiza la importancia de considerar dicho constructo en relación a la formación del psicólogo y se exponen algunos resultados preliminares derivados de su estudio en relación con otras variables criterio en una muestra de estudiantes de psicología de la Universidad de Buenos Aires, y en comparación con grupos de estudiantes de otras disciplinas (Geografía y Ciencias Ambientales). Los resultados obtenidos indican que existe una correlación positiva entre la Inteligencia Emocional entendida como rasgo de personalidad y la Satisfacción con la propia vida y el Potencial Resiliente. Estos hallazgos confirman los obtenidos en otros estudios que sostienen la existencia de correlación entre estas variables. Asimismo, la existencia de diferencias significativas al comparar los estudiantes de Psicología con otros grupos de estudiantes; a favor del grupo de Psicología, nos permite reflexionar acerca de las posibles interacciones entre la preferencia en la elección vocacional y la probable influencia que la misma formación tiene en la promoción de ciertas capacidades emocionales. Los hallazgos obtenidos indican que el desarrollo emocional de los estudiantes de psicología representa una tarea de vital importancia, no sólo por la asociación existente entre Inteligencia Emocional y diversas variables de relevancia para el éxito académico, sino también en función del perfil profesional que se demanda y proyecta actualmente sobre el psicólogo.