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La adolescencia es un estadio con numerosos cambios neurobiológicos, los cuales pueden subyacer a la vulnerabilidad al abuso de droga observado durante este estadio. Los adolescentes, comparados con los adultos, presentan una insensibilidad a los efectos aversivos del alcohol y un aumento en la sensibilidad a los positivos. El bloqueo del sistema receptor opioide kappa (KOR), mediante la administración de antagonistas como nor-BNI puede alterar per se el consumo de alcohol y también modula las consecuencias del estrés, un factor de riesgo que promueve el consumo de alcohol. Diversos estudios demuestran que los adolescentes son más susceptibles a los efectos del estrés. Se ha sugerido la utilidad de los antagonistas kappa para disminuir el consumo de alcohol inducido por estrés, si bien los resultados son controversiales. En este trabajo analizamos el consumo de alcohol en ratas adolescentes expuestas a estrés y tratadas o no con un antagonista del receptor KOR. Ratas adolescentes, hembras y machos, fueron expuestas a estrés por inmovilización (5 sesiones, 120 min), y 72 horas después comenzó un protocolo de auto-administración intermitente de etanol (4 o 5% de etanol vs. agua), de 2 semanas de duración. El Experimento 2 replicó estos procedimientos en ratas hembras adolescentes administradas con 0.0 o 10.0 mg/kg de nor-BNI 24 horas previas a la primera sesión de estrés. Se observaron significativas diferencias entre hembras y machos en la respuesta al estrés. Las hembras estresadas consumieron significativamente mayores cantidades de alcohol que las no estresadas, mientras que el perfil opuesto se vio en los machos. El efecto facilitador del estrés sobre el consumo del alcohol en hembras fue revertido por nor-BNI. Estos resultados brindan información relevante para entender diferencias de sexo en las interacciones estrés-alcohol y sugieren potenciales tratamientos para paliar estos efectos.