Obtención de aguas seguras: problemáticas de la región

VERÓNICA B. RAJAL

Salta

Congreso; XII Congreso Argentino de Graduados de Nutrición; 2015

El agua es un recurso esencial para la vida. Permite satisfacer las necesidades humanas básicas, es necesaria para la agricultura, la ganadería, la salud de los ecosistemas, los procesos industriales, la obtención de energía y el transporte. Es un eslabón crucial hacia el desarrollo sostenible de cualquier sociedad y representa, junto con la energía y los alimentos, una posibilidad de conflicto global, con tendencia a su agudización si no se operan cambios importantes rápidamente.Aunque el agua es el componente más abundante en la tierra no se encuentra uniformemente distribuido. Tampoco su presencia significa que esté disponible para su uso sin la necesidad de de tecnologías especiales, debido a que puede contener partículas, sustancias u organismos nocivos que producen enfermedad. Este dilema, usar agua aunque no tenga la calidad necesaria o no usarla, y morir más rápidamente, es parte de la vida cotidiana de muchos pueblos. Hablar de la calidad del agua significa tener en cuenta que ésta debe reunir una serie de características físicas, químicas y microbiológicas que aseguren su aptitud para el uso que se le ha destinado. El uso será el factor determinante en cuanto a las exigencias referidas a la calidad, lo que está establecido en las legislaciones vigentes. Lógicamente, las mayores exigencias están previstas para el agua de consumo humano. El requerimiento de cumplir con las exigencias planteadas en cuanto a la calidad, el conocimiento de las limitaciones y dificultades de los métodos establecidos para determinarla, la necesidad creciente de mitigar el impacto de las actividades humanas sobre los recursos acuáticos que aseguren la preservación de los ecosistemas, la presión para el desarrollo de nuevas tecnologías que permitan el acceso al agua segura son algunos de los factores que han contribuido a las nuevas tendencias en el campo. Entre éstas se incluye la determinación de microorganismos antes no reglamentados (virus, parásitos y bacterias que permiten determinar el origen de la contaminación fecal) causantes de numerosas enfermedades, de contaminantes emergentes (fármacos y disruptores del sistema endocrino, entre otras) y el empleo de nueva metodología más sensible, específica y rápida. Todo esto, junto con la evaluación de riesgos, facilita la toma de decisiones a los responsables de la gestión del agua.Si bien hay importantes esfuerzos concentrados en propiciar tecnologías ?verdes?, en controlar, mitigar y remediar los impactos producidos por las actividades humanas, todavía no es posible garantizar el acceso a agua segura para el consumo como un derecho humano. Si bien el factor más importante para asegurar de manera consistente la calidad del agua de consumo es la calidad de las fuentes de agua y su protección, hoy en día existe tecnología que permite obtener agua segura a partir de una fuente contaminada, o incluso de aguas residuales, aunque a costos probablemente muy elevados para la mayoría de naciones.