Efecto de la combinación de diferentes cepas de Saccharomyces cerevisiae productoras de toxinas sobre la actividad killer

MIGUEL FERNÁNDEZ DE ULLIVARRI; LUCÍA M. MENDOZA; RAÚL R. RAYA; MARTA E. FARÍAS

Mendoza

Jornada; III JORNADAS NACIONALES DE BIOLOGÍA Y BIOTECNOLOGÍA DE LEVADURAS; 2011

INTA - Mendoza

Algunas cepas de levaduras producen toxinas proteicas o glicoproteicas capaces de matar o inhibir el crecimiento de otros microorganismos. Existe un interés creciente en el uso de levaduras killer como cultivos iniciadores de fermentación, relacionado a su posible predominio durante el proceso de vinificación para la obtención de productos fermentados de calidad controlada. Evaluamos la actividad killer de diferentes sobrenadantes de Saccharomyces cerevisiae, obtenidos a partir de cocultivos o combinando monocultivos (relación 1:1) de cepas autóctonas productoras de toxinas (Cf5, Cf8, Cf13, Cf19, Cf21 y M12) y una cepa killer de referencia (S. cerevisiae tipo K1), frente a la cepa sensible S. cerevisiae P351. En todas las combinaciones se incluye la cepa Cf8, seleccionada en estudios previos como la mejor productora de toxinas killer entre las cepas autóctonas. Las levaduras se cultivan en caldo YPD-MB (extracto de levadura 10 g/l, peptona 20 g/l, glucosa 20 g/l, buffer citrato/fosfato pH 4,2) durante 96 h a 18 ºC. Las células se separan del sobrenadante por centrifugación a 4 ºC y 13000 rpm durante 10 min. Los sobrenadantes se enriquecen con YPD-MB 10x (final 1x) y se esterilizan por filtración con membranas de 0,22 μm. Los filtrados se inoculan con la cepa P351 y se incuban a 18 ºC. La actividad killer se evalúa mediante determinación de viabilidad celular por el método de diluciones sucesivas a diferentes tiempos de incubación (0, 18 y 36 h). Los sobrenadantes de cada monocultivo y el medio no fermentado fueron utilizados como control de actividad killer (control toxina) y control de crecimiento, respectivamente. La actividad killer fue expresada como % de reducción de viabilidad medida en relación al control de crecimiento. Se observa un efecto sinérgico sobre las actividades killer cuando se combinan Cf5 monocultivo, Cf19 cocultivo y M12 monocultivo, las cuales presentan un incremento de 12, 134 y 6% respectivamente, en relación a sus controles de toxina; y un incremento de 41, 45 y 45% respectivamente, en relación al control Cf8. No se observan diferencias significativas cuando se combinan las cepas Cf13 y Cf21, Este estudio evidencia que la actividad killer de S. cerevisiae Cf8 podría ser mejorada mediante su combinación con diferentes cepas productoras de toxinas, siendo este efecto cepa-dependiente como así también dependiente de las condiciones de cultivo.