CIG   05423
CENTRO DE INVESTIGACIONES GEOLOGICAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
La Formación Mulichinco en el Sur de Mendoza: implicancias para reconstrucciones paleogeográficas del Valanginiano de la Cuenca Neuquina central
Autor/es:
SCHWARZ, E.; VEIGA, G.D.; ALVAREZ, G.
Reunión:
Congreso; XVIII Congreso Geológico Argentino; 2011
Resumen:
La Formación Mulichinco (Weaver, 1931) se compone de sedimentitas continentales, transicionales y marinas, y se desarrolló durante el Valanginiano Temprano alto y el Valanginiano Tardío bajo (Schwarz et al., 2006). La unidad se dispone en forma abrupta sobre depósitos cuencales de la Formación Vaca Muerta (Tithoniano-Valanginiano inferior), y se interpreta como una cuña de mar bajo de segundo orden desarrollada sobre un límite de secuencia regional, denominado originalmente Discontinuidad Intravalanginiana (Gulisano et al., 1984). Dicha cuña representa una única secuencia depositacional de tercer orden, cuyos cortejos de mar bajo, transgresivo y de mar alto fueron definidos en afloramiento (Schwarz y Howell, 2005). La Formación Mulichinco en el extremo norte de la Provincia del Neuquén se compone enteramente de depósitos marinos que representan condiciones desde frente de playa hasta costa afuera (Schwarz, 1999; Schwarz y Howell, 2005). A grandes rasgos, los cortejos sedimentarios en esta región se correlacionan con tres intervalos estratigráficos bien diferenciables denominados miembros Inferior (de mar bajo), Medio (transgresivo) y Superior (de mar alto). Por su parte, el alcance estratigráfico de la Formación Mulichinco en el sur de Mendoza (37°10´-36°40´S) era hasta hace poco motivo de discrepancia y en algunos estudios ni siquiera era considerada su existencia (e.g. Narciso et al., 2001). En esta región la nomenclatura estratigráfica más aceptada para la sucesión del Valanginiano temprano a tardío incluía las siguientes unidades: Formación Vaca Muerta (tope), Formación Quintuco, “Lengua Superior de Chachao” y, finalmente, Formación Mulichinco (Legarreta y Kozlowski, 1981). Por su parte, en el área de subsuelo adyacente (bloque Cañadón Amarillo y cercanos) la terminología más utilizada para la sucesión analizada comprende un intervalo conocido como “Vaca Muerta más Quintuco” (240 m), sobreyacido por otro denominado Formación Mulichinco (< 90 m de espesor). A partir de estudios integrados de los afloramientos de la Sierra de Reyes y de testigos de corona pertenecientes a sondeos de yacimientos adyacentes se reconoció la existencia de la Discontinuidad Intravalanginiana en la base de la anteriormente denominada “Formación Quintuco”. Esta superficie de discontinuidad sugiere un período de erosión y bypass relacionado a su vez con un significativo descenso del nivel relativo del mar y por lo tanto se correlaciona con el límite de secuencia de segundo orden de la Formación Mulichinco identificado en gran parte de la Provincia del Neuquén. Al mismo tiempo, se distinguieron dentro de la unidad tres intervalos estratigráficos bien distinguibles entre sí por arriba de dicha discontinuidad, factibles de ser correlacionados con los desarrollados en el norte de Neuquén, no sólo por su similitud facial sino también por el contenido de amonites. El Miembro Inferior de la Formación Mulichinco en el sur de Mendoza comienza con un delgado nivel carbonático esqueletal (3-5 m), el cual grada verticalmente a una sucesión (50-30 m) compuesta por depósitos silicoclásticos y mixtos con el desarrollo de secuencias grano y estratocrecientes y frecuentes estructuras mecánicas. Si bien prevalecen areniscas con estratificación entrecruzada monticular en las porciones basales de esta sucesión clástica, hacia el tope comienzan a dominar areniscas esqueletales y grainstones con estratificación entrecruzada sigmoidal, óndulas de corriente con sentidos contrapuestos y dobles recubrimientos de arcilla (reconocibles principalmente en testigos corona). Este intervalo estratigráfico sugiere una evolución temporal desde un sistema marino con dominio de flujos oscilatorios y combinados (de tormentas) hacia un sistema con menor suministro clástico (o mayor productividad carbonática) y preponderancia de flujos unidireccionales hasta reversos en los estadios finales de su desarrollo. En forma adicional, la existencia de depósitos marinos tanto en los afloramientos como en sondeos ubicados unos 20 km al este, permite reconstruir un sistema marino más amplio en comparación con reconstrucciones paleogeográficas previas para el estadio de mar bajo (e.g. Schwarz y Howell, 2005). El Miembro Inferior culmina en forma abrupta con la aparición de margas y pelitas que gradan a conspicuos niveles de boundstones y wackestones de ostras cementantes. En algunos casos también se desarrollan ciclos verticales con pasaje gradual a packstones/grainstones esqueletales dominados por bivalvos infaunales. Amonites indicativos de la biozona de Olcostephanus (Olcostephanus) atherstoni se encuentran presentes en los bancos de carbonatos. Esta sucesión o Miembro Medio, que corresponde al intervalo originalmente denominado “Lengua Superior de la Formación Chachao” (Legarreta y Kozlowski, 1984) se interpreta como el resultado de la instalación de un sistema con alta productividad carbonática, baja pendiente y bajo a nulo aporte terrígeno relacionado con un cortejo transgresivo de tercer orden. En subsuelo el Miembro Medio (< 30 m) posee mayor extensión que el subyacente, y sus depósitos se registran hasta 60 km al este de los afloramientos de Sierra de Reyes (aunque mostrando un progresivo adelgazamiento). El Miembro Superior en el sur de Mendoza (90-130 m de potencia) está conformada por paquetes granocrecientes desde fangolitas hasta areniscas silicoclásticas de ambiente marino somero sobreyacidas en forma abrupta por calizas esqueletales, conformando ciclos de alta frecuencia. Esta sucesión representa la reinstauración de un sistema silicoclástico, pero con variaciones recurrentes del aporte terrígeno y productividad carbonática. Al igual que para el Miembro Inferior, la existencia de depósitos francamente marinos en numerosos sondeos del subsuelo mendocino permite generar reconstrucciones más ajustadas de la paleogeografía del estadío de mar alto. Más aún, la creciente participación de elementos carbonáticos en el sector mendocino de la Cuenca Neuquina sugiere que los sistemas de distribución de sedimentos dentro del medio marino (corrientes de plataforma) eran cada vez menos eficaces en esa dirección resultando en áreas con acomodación pero con bajo aporte terrígeno. El estudio integrado de la Formación Mulichinco en afloramientos y subsuelo del extremo sur de Mendoza permite identificar tres estadios evolutivos para la secuencia de mar bajo de tercer orden que se correlacionan estrechamente con los identificados en el norte de Neuquén. Por otra parte, facilita una mejor comprensión sobre los procesos que favorecieron la distribución de sedimentos, al tiempo que permite hacer nuevas y más ajustadas reconstrucciones paleográficas para el Valanginiano temprano de la Cuenca Neuquina. Gulisano, C.A., Gutiérrez Pleimling, A.R. y Digregorio, R.E., 1984. Análisis estratigráfico del intervalo Tithoniano-Valanginiano (Formaciones Vaca Muerta, Quintuco y Mulichinco) en el suroeste de la provincia de Neuquén. IX Cong. Geol. Arg. S.C. Bariloche: Actas I: 221-235.. Legarreta, L., Kozlowski, E. (1981) Estratigrafía y sedimentología de la Formación Chachao, Provincia de Mendoza. VIII Congreso Geológico Argentino, Actas II, 521-543. San Luis. Schwarz, E. (1999). Facies sedimentarias y modelo deposicional de la Formación Mulichinco (Valanginiano), Cuenca Neuquina Septentrional. Asociación Argentina de Sedimentología Revista, vol. 6, 37-59. Schwarz, E. y Howell, J.A., 2005. Sedimentary evolution and depositional architecture of a Lowstand Sequence Set: The Lower Cretaceous Mulichinco Formation, Neuquén Basin, Argentina. En: The Neuquén Basin, Argentina: a case study in Sequence Stratigraphy and Basin Dynamics (Eds. Veiga, G., Spalletti, L., Howell, J. and Schwarz, E.), Geological Society of London, Special Publications, v. 252: pp. 109-138. Schwarz, E., Spalletti, L.A., Howell, J.A. (2006) Sedimentary response to a tectonically-induced sea-level fall in a shallow back-arc basin: the Mulichinco Formation (Lower Cretaceous), Neuquén Basin, Argentina. Sedimentology, vol. 53, 55-81. Weaver, V. (1931) Palaeontology of the Jurassic and Cretaceous central Argentina. University of Washington, Memoir, Seattle, 496 pp.