Cronología de aparición y correlación entre cambios mtabólicos y función insular inducidos por dieta rica en fructosa (DRF).

ROMÁN CL, BORELLI MI, MAIZTEGUI B, BLAIOTTA C, MASSA ML, GAGLIARDINO JJ.

Mar del Plata

Congreso; LVI Reunion Cientifica Anual SAIC; 2011

SAIC

La administración de DRF durante 21 días induce hipertrigliceridemia, insulinorresistencia IR), hiperinsulinemia y aumento de la secreción de insulina (SI) en respuesta a la glucosa (G). Objetivo: estudiar la cronología de aparición de esos cambios inducidos por la DRF. Métodos: ratas Wistar macho alimentadas con dieta comercial estándar divididas en 2 grupos: Control (C) y con DRF (10% en el agua de bebida) durante 7, 14 y 21 días (DRF1, DRF2 y DRF3). Al término de esos períodos se extrajeron muestras de sangre para determinar: G, insulina (I) y Triglicéridos (TG). Se calculó el HOMA IR y el HOMA B. SI: se incubaron 5 islotes a 37º C, durante 1 h . Resultados: Parámetros metabólicos (* p< 0.05 C vs DRF, # p< 0.05 DRF3 vs DRF): I (ng/ml): C1: 0,5±0,07; DRF1: 0,6±0,06; C2: 0,6±0,06; DRF2: 0,7±0,06; C3: 0,6±0,04; DRF3: 1,1±0,2*. G (mg/dl): C1: 115±3; DRF1: 118±4; C2: 103±3; DRF2: 121±6; C3: 117±2; DRF3: 117±3. TG (mg/dl): C1: 103±6; DRF1: 134±11*; C2: 112±15; DRF2: 172±15*; C3: 102±11; DRF3: 226±31*. HOMA IR: C1: 3,78±0,49; DRF1: 4,90±0,42; C2: 3,96±0,35; DRF2: 5,23±0,46*; C3: 4,60±0,32; DRF3: 8,10±1,18*. HOMA B: C1: 39,41±5; DRF1: 47,19±5,24; C2: 45,79±5,31; DRF2: 53,48±5,18; C3: 48,45±3,52; DRF3: 78,48±11,62*. Secreción de I (ng/islote/h)G 3.3 mM: C1: 0,17 ± 0,01; DRF1: 0,16 ± 0,02; C2: 0,16 ± 0,02; DRF2: 0,18 ± 0,02; C3: 0,13 ± 0,01; DRF3: 0,13 ± 0,01. Secreción de I (ng/islote/h)G 8.3 mM: C1: 0,96 ± 0.08*; DRF1: 0,70 ± 0.10; C2: 1,22 ± 0.07; DRF2: 1,21 ± 0.09; C3: 0,78 ± 0.09; DRF3: 1,34 ± 0.09*#. Secreción de I (ng/islote/h)G 16.7 mM: C1: 1,35 ± 0.13*; DRF1: 1,24 ± 0.09; C2: 2,04 ± 0.17; DRF2: 1,70 ± 0.11; C3: 1,16 ± 0.15; DRF3: 2,13 ± 0.12*#. Conclusiones: la DRF aumenta significativa y tempranamente (7 días de tratamiento) el nivel de TG plasmáticos, mientras que la IR y el aumento de la función insular se manifiesta a los 21 días: esto sugiere que los cambios inducidos por la DRF en la función B insular serían consecutiva a los ocurridos previamente en la función de otros tejidos como el hígado y el tejido adiposo.