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Introducción: Los animales, específicamente los perros, ocupan un lugar importante en la vida cotidiana de las personas. Algunos autores han observado que los niños pequeños poseen un interés y motivación innata hacia los animales (Archer & Monton, 2011; DeLoache, Pickard, & Lobue, 2011; Little, 2012; Maestripieri & Pelka, 2002). Cuando los niños observan que un ser humano necesita ayuda, los niños tienden a ayudarlos de forma natural a cumplir sus objetivos (Warren & Tomasello, 2006, 2007). Objetivo: comparar en niños de 24 y 36 meses las conductas empáticas (colaboración y ayuda) hacia los perros. Método: Participaron 20 niños, asignados a dos grupos según la edad. G1: 9 niños de dos años (M=22, 78; DT=2,22) y G2: 11niños de tres años (M=37,27; DT= 1,00). Materiales: utilizaremos un perro (entrenado), una caja, una cuchara y alimento para perro. Procedimiento: se adapto la tarea de Warreken y Tomasello (2006). Dos fases: 1-Orientación: el objetivo principal de esta fase era familiarizar al niño con los materiales, el tipo de actividad que realizarían en la prueba, y con el animal, perro. La experimentadora les mostraba al niño cómo podía meter un objeto en una caja a través de un agujero que contenía en la parte superior, y como podía recuperar el por una puertita de la parte frontal de la caja. Posteriormente, se incentivaba al niño a meter el objeto, abrir la caja y sacar el objeto de su interior. Luego, la experimentadora le decía al niño: ?Te traje una sorpresa, es un perrito ¿te gustan los perritos??. Mientras la experimentadora le informaba al niño de la sorpresa, la colaboradora procedía a buscar al perro que se encontraba en una habitación contigua. Una vez que el colaboradora traía a la escena al perro se proseguía diciéndole al niño: ?mira este perrito se llama Teo, y Teo es un perrito que tiene hambre ¡pobrecito!. ¿Queres que le demos de comer??. Inmediatamente, la colaboradora vertía la cuchara en alimento y le mostraba al niño como podía darle de comer al perro. Una vez finalizada la orientación comenzaba la prueba. 2- Prueba: En la fase de prueba la experimentadora le decía al niño: ?¿queres que le demos de comer??. La colaboradora vertía la cuchara en el alimento y luego colocaba la cuchara en el extremo del agujero de la caja. El perro lamia la cuchara con alimento y la empujaba por el agujero de la caja. Se realizaron 4 subpruebas. La variable dependiente fue el número de subpruebas correctas. Una respuesta fue codificada como correcta si el niño colaboraba con el animal, es decir le daba de comer al perro. Resultados: Los resultados de estudio mostraron que los niños de ambas edades muestran conductas empáticas hacia los perros. Los niños de 36 meses (n=11) mostraron un 89% (X2=37, 35; gl=1; p