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El incremento de las prácticas agropecuarias condujo al aumento del uso de agroquímicos para asegurar la productividad de los cultivos. No obstante, estos productos tienen un impacto negativo sobre el medio ambiente, y por eso es muy importante buscar alternativas a su uso que aseguren la sustentabilidad y la productividad de este sector. Una alternativa prometedora que propone la biotecnología es el uso de inoculantes microbianos como biofertilizantes, fitoestimulantes o biocontroladores. Los inoculantes son productos tecnológicos cuyo principio activo es un microorganismo vivo (bacterias u hongos) que interacciona con las plantas mejorando la nutrición y el crecimiento vegetal con la posibilidad de obtener elevados rendimientos agrícolas y al mismo tiempo preservar el ambiente (Álvarez y Sanjuán, 2007). Entre las Bacterias Promotoras del crecimiento vegetal (BPCV) con potencial uso como inoculantes encontramos diferentes especies dentro de los géneros Azospirillum, Burkholderia, Herbaspirillum, Pseudomonas, Gluconacetobacter, entre otros (Dobbelaere et al., 2003). Un problema que se encuentra a menudo en la mayoría de los experimentos a campo e invernadero realizados con BPCV es la inconsistencia de la respuesta de las plantas a la inoculación, siendo entonces poco probable garantizar el éxito del experimento. Esta falta de respuesta es atribuida generalmente a una ineficiente colonización (Lugtenberg et al., 2001). Una exitosa colonización de la rizosfera y de la raíz de la planta es requerida para que las BPCV puedan ejercer sus efectos promotores del crecimiento. La colonización de la raíz es un complejo proceso que ocurre bajo la influencia de varios parámetros tales como la cepa bacteriana, los exudados de la raíz, factores bióticos y abióticos, entre otros. El conocimiento de la participación de cada uno de estos factores en la interacción planta-microorganismo permitirá el diseño de técnicas de inoculación más efectivas. Un aspecto poco estudiado es el referido a la dosis y concentración de inoculo requerida para que las BPCV colonicen eficientemente las raíces y, en el caso de las endófitas, para que ingresen a los tejidos internos. También se conoce poco sobre el número de microorganismos por semilla o plántula que se requieren para obtener una respuesta vegetal positiva. Otro aspecto importante a considerar en un potencial inoculante es la evaluación de la supervivencia en el medio soporte del mismo y en la semilla, ya que, dependiendo de las condiciones edafoclimáticas y de las características propias de la especie vegetal, el período de supervivencia hasta la germinación puede ser extenso. En este trabajo se presenta la evaluación del crecimiento y supervivencia en envases plásticos y semillas de trigo de B. tropica Mto-293, diazótrofo endófito natural de maíz y tomate (Reis et al., 2004) con características de promotor del crecimiento vegetal, con el objetivo de conducir a una aplicación más eficiente del mismo como inoculante en cultivos de cereales.