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El consumo de pescados, principalmente de especies ricas en ácidos grasos poli-insaturados n-3, es benéfico para la salud. Aportan componentes nutracéutico como de EPA (C20:5 n-3) y DHA (C22:6n-3) que previenen y reducen enfermedades como aterosclerosis, ataques al corazón, enfermedades de las arterias coronarias, hipertensión, cáncer, patologías mentales como depresión y esquizofrenia. Además, intervienen en el desarrollo intelectual y visual de los niños. El objetivo del trabajo fue caracterizar y evaluar la composición lipídica, principalmente de los ácidos grasos (AG) n-3 con propiedades nutraceuticas, presentes en una especie grasa, de bajo valor comercial y abundante en las costas bonaerense, como es la Brevortia aurea. También se determinó si su carne aporta suficiente EPA y DHA para cubrir los requerimientos diarios recomendados por American Heart Association de 1000mg. Existen escasos datos sobre la composición lipídica de la fauna ictícola Argentina, estudios previos de la especie, muestran importantes variaciones en su contenido lipídico asociado al ciclo biológico, presentando un máximo en julio y un mínimo en diciembre. En este trabajo, se analizaron ejemplares adultos, capturados por la flota costera de Mar del Plata en el mes de julio y diciembre. Se determinó lípidos totales (LT) por el método de Bligh & Dyer y el perfil de ácidos grasos por cromatografía gaseosa. Los LT de la porción comestible presentaron valores de 20,63±7,05% en julio y 3,21±2,66% en diciembre. El perfil de ácidos graso mostró que en ambos meses, los LT están constituidos por el 35-36% ácidos grasos saturados, 61,5-63% ácidos grasos insaturados (AGI) de los cuales entre el 36-38% son monoinsaturados (AGMI) y 23-31% son poliinsaturados (AGPI). Estos grupos de ácidos grasos no presentaron diferencias significativas. Se observó un aumento poco significativo de los AGPI, aunque sí se encontraron diferencias entre los ácidos grasos que constituyen el perfil lipídico. Los principales AGMI son el oleico (18% en julio y 15% en diciembre) y el palmitoleico que se reduce significativamente de 13,5% en julio a 6% en diciembre. El DHA es el constituyente mayoritario de los AGPI, se duplicó de julio a diciembre y alcanzó el 20% de los LT del músculo. El EPA no presentó cambios, 6% en ambos meses. Considerando los contenidos de LT en cada periodo analizado, se observa que los aportes de EPA y DHA son considerables. Cada 100g de músculo de esta especie se incorporarían cantidades significativas de estos ácidos grasos. Los ejemplares de invierno, aportarían 2500mg de los cuales 60% es DHA y los de verano 550mg de los cuales el 80% es DHA, componente considerado de real importancia nutricional. Por lo cual el consumo de esta especie subutilizada para el consumo humano sería una buena opción nutricional.