Materialidad de la producción de Casira, pueblo alfarero contemporáneo

M.F SERRA; N.M. RENDTORFF; A. PALTRINIERI

CABA

Congreso; 1ª Reunión Internacional Intersecciones ciencia, arte y patrimonio; 2018

UBA

La Puna es una altiplanicie de gran extensión que comprende el norte de la Argentina, Chile y el sur de Bolivia. La puna Argentina abarca las provincias de Jujuy, Salta y Catamarca. En Jujuy, al límite con Bolivia, se encuentra el pueblo de Casira. La gran altura (entre los 3500 y 3600 msnm), la gran amplitud térmica, la baja humedad del ambiente, las bajas precipitaciones, la rigurosidad del clima y la escasez de recursos naturales en comparación a otras regiones caracterizan la geografía de esta región. En este territorio árido un pueblo ha concentrado su actividad productiva en torno a la producción cerámica, por lo cual ha dado en autodenominarse ?pueblo alfarero?. Para sus habitantes la relevancia de la alfarería no radica sólo en que constituye su mayor fuente de ingresos, sino que además mantiene viva su tradición cultural, constituyéndose en uno de los principales factores de la construcción colectiva de su identidad como pueblo.Estas cerámicas conservan en sus modos de producción artesanal un contenido cultural de más de 500 años de historia (Pérez Pieroni 2015). Sus ollas son las protagonistas de la fiesta popular Manca Fiesta o Fiesta de la Olla, acontecimiento que se realiza desde antes de la llegada del español, año tras año en la ciudad de La Quiaca (Menacho 2001). A su vez, la reciente pluralidad en los modos de comprender el arte cerámico contemporáneo (Tarela 2016) nos habilita a reflexionar sobre la producción de Casira como un espacio artístico colectivo, donde conviven saberes ancestrales y prácticas cotidianas de la comunidad.Además, estas prácticas productivas constituyen una estrategia de subsistencia determinada por su territorio. Maíz, habas, arvejas, porotos: los alimentos de la puna exigen una adecuada cocción para ser digeridos. En las alturas el agua hierve hacia los 85ºC prolongando los tiempos de cocción que requieren. Por ello, los pueblos asentados desde antaño en estos territorios han desarrollado una tecnología precisa para esta práctica cultural de subsistencia: ollas cerámicas muy resistentes al choque térmico (Fernández 1999). En el último par de décadas, las cerámicas realizadas en Casira han sido de interés como objeto de estudio desde diferentes enfoques, que describen sus orígenes prehispánicos (Pérez Pieroni 2015), estudian su funcionalidad vinculada a la fabricación y uso de las vasijas (Menacho 2007), analizan los procesos de transformaciones al integrarse en mercados urbanos (Rodríguez 2002) o examinan la selección de las materias primas empleadas (Fernández 1999). Continuando el recorrido que este cuerpo de investigaciones ha trazado, y formando parte de un estudio más amplio sobre esta práctica cultural, nos proponemos en este trabajo detallar las propiedades tecnológicas y termomecánicas específicas de estos cerámicos. Para ello analizamos, evaluamos y describimos la composición química, composición cristaloquímica, la microestructura, las propiedades texturales, las propiedades mecánicas y el comportamiento dilatométrico que desarrollan en una olla de Casira.