ANTROPOCENO: CAMBIO DE PARADIGMA EN LOS MATERIALES CONSTRUCTIVOS. EL MICELIO FÚNGICO COMO ALTERNATIVA A LOS AISLANTES PLÁSTICOS.

GAGGINO, ROSANA; KREIKER, JERÓNIMO; FERNÁNDEZ, NATALIA; POSITIERI, MARIA JOSEFINA

Modalidad Virtual

Jornada; II JORNADAS DE FUNDAMENTOS Y APLICACIONES DE LA INTERDISCIPLINA; 2021

FCEN, FFyL, FCE y FSOC de la UBA

El tema propuesto se basa en una investigación en curso llevada a cabo en el Centro Experimental de la Vivienda Económica en Córdoba, y forma parte de la línea investigativa que propone el desarrollo de componentes constructivos a partir de residuos.En este caso se enfoca en el uso de los desechos lignocelulósicos aglutinados biológicamente con micelio fúngico como material para promover la descontaminación del ambiente y la construcción de viviendas sostenibles. El micelio es el aparato vegetativo de algunos hongos cuya función es absorber de su entorno los nutrientes de los compuestos orgánicos que necesita para alimentarse. Está constituido por filamentos pluricelulares denominados hifas y crece en materiales celulósicos que en general son residuos. Estos hongos se alimentan degradando los complejos estructurales de los residuos vegetales (lignina, hemicelulosa y celulosa) mediante un sistema enzimático específico y transformándolos en moléculas simples, fáciles de absorber. Es, por lo tanto, un recurso natural renovable. La hipótesis se basa en determinar que los materiales alternativos basados en micelio cuentan con propiedades técnicas de resistencia mecánica y aislación térmica según las normas vigentes en nuestro país y que podrían reemplazar ciertos productos del mercado de la construcción tales como los paneles aislantes hechos de poliestireno expandido (EPS) o lana de vidrio, que actualmente se fabrican y unen con resinas sintéticas en base a derivados del petróleo. El EPS no es un material biodegradable, por lo cual su residuo no es absorbido por la naturaleza, agravando la contaminación ambiental. Este material está presente en gran parte del embalaje de artículos electrónicos. Y así como se recibe, en la mayoría de los casos, se tira a la basura. Abordar las cuestiones técnicas específicas del caso, requiere la conformación de un equipo transdisciplinar compuesto por ingenieros, biólogos, químicos y arquitectos, desde una mirada que vincula esta búsqueda de nuevos materiales biodegradables a la teoría del Antropoceno. El concepto de Antropoceno fue establecido por Paul Crutzen en el año 2002, quien lo definió como el periodo que se origina al final del siglo XVIII, en el cual se denotan los cambios que el hombre ha generado sobre la faz de la Tierra. A este nuevo estadio o fase de tendencia global se le ha dado el nombre de Antropoceno, era geológica que representa el accionar potente del ser humano sobre la litosfera, la biósfera, la hidrósfera y la atmósfera, es decir sobre el planeta en su conjunto, catalizando el aceleramiento del cambio climático de origen natural, con efectos futuros inciertos y con consecuencias adversas para muchas especies, en diversas dimensiones, incluida la humana. En el momento del Antropoceno, el entramado del micelio y los hongos que todo lo degradan nos ofrecen, además de la posibilidad de inspirarnos en su rol de grandes recicladores de la naturaleza, un paradigma de fabricación alternativo basado en el crecimiento de recursos en lugar de la extracción de las materias primas.