IADO   05364
INSTITUTO ARGENTINO DE OCEANOGRAFIA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Efecto de un afloramiento rocoso sobre la estabilidad morfológica de los sedimentos de fondo en un canal mesomareal del estuario de Bahía Blanca, Argentina
Autor/es:
SILVIA S. GINSBERG; SALVADOR ALIOTTA
Lugar:
Puerto La Cruz, Venezuela.
Reunión:
Congreso; V Congreso Latinoamericano de Sedimentología y I Congreso Venezolano de Geocientíficos del Petróleo.; 2009
Institución organizadora:
Asociación Venezolana de Geocientíficos del Petroleo (AVGP).
Resumen:
El canal Cabeza de Buey, localizado en el estuario de Bahía Blanca (Argentina), representa un importante canal de marea dentro de un sistema de canales mesomareales interconectados, separados por amplias llanuras fangosas y pequeñas islas. El mismo confluye en el canal Principal, dentro del cual se ubica  la vía de acceso a uno de los sistema portuario de mayor capacidad de la Argentina. El canal Cabeza de Buey posee un curso meandroso de reducido calado (hasta 8m), donde la línea de máxima profundidad modifica su posición según el tramo considerado.  Su lecho, en general, es plano, carente de formas de fondo, siendo los sedimentos predominantemente pelíticos, con porcentajes subordinados de arena muy fina. El tamaño medio del sedimento varía entre 5,1 phi y 6,5 phi., presentándose pobremente seleccionados. Un rasgo morfológico particular observado en el lecho del canal, lo constituye un pozo de geometría aproximadamente circular (35 m de diámetro) y una profundidad máxima de 7 m. La integración de datos batimétrico-morfológicos  derivados de relevamientos con sonda multihaz (Geoswath Plus, 250 kHz) y sonar de barrido lateral (SonarLink Seamap, 100 kHz), junto con información sísmica (perfilador de 3,5 kHz) y corrientes (ADCP Workhorse, 600 kHz) permitieron analizar la hidrodinámica en torno a dicho pozo subacueo, infiriendo el origen y la evolución morfológica del mismo. Desde un punto de vista geológico, la presencia de dicho pozo en el lecho del canal Cabeza de Buey se halla vinculada a la estructura sedimentaria del subfondo. Los datos sísmicos definen la existencia de un alto topográfico, el cual constituye un afloramiento rocoso que circunda parcialmente el borde del pozo.  El muestreo realizado establece que la roca corresponde a una limolita con proporciones variables de arcilla y arena fina. Estos materiales, que en general se presentan compactados y con cementación calcárea, se asocian a un ambiente fluvial, desarrollado previamente a la ingresión marina holocena. El techo de esta sedimentita conforma una superficie de discontinuidad erosiva, la cual se halla aflorando directamente en el fondo o bien subyace a los sedimentos marinos más modernos.  El espesor de dicha roca controla la profundidad y morfología del pozo. El análisis de las corrientes indica que las velocidades promedio máximas en condiciones de creciente y bajante alcanzan valores del orden de 0,7-0,8 m/seg. Considerando la sección transversal al cauce del canal se advierte que el flujo presenta direcciones más uniformes durante la marea bajante que en situación de creciente. Asimismo, se determina que principalmente en condiciones de reflujo se produce una significativa turbulencia en el sector mas profundo del pozo, la cual promueve una acción erosiva, con la consecuente profundización del mismo.  La interacción entre las corrientes de marea y el afloramiento rocoso modifica las condiciones hidrodinámicas locales, generando un modelo de circulación tridimensional que regula la distribución del sedimento y el efecto  erosivo  modelador de la geoforma.