IADO   05364
INSTITUTO ARGENTINO DE OCEANOGRAFIA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
La escasez de agua en Bahia Blanca a través de su historia: las aguas termales surgentes.
Autor/es:
DEL VALLE, M.; PICCOLO M. C.; PIZARRO, N.
Lugar:
Bahia Blanca
Reunión:
Jornada; IX Jornadas Nacionales de Geografia Fisica; 2012
Institución organizadora:
Universidad Nacional del Sur
Resumen:
Este trabajo tiene como objetivo identificar, caracterizar y analizar históricamente la escasez del agua en la localidad de Bahía Blanca y la utilización de las surgentes naturales de agua termal. Se efectuó una revisión de la prensa escrita desde la primera publicación del diario La Nueva Provincia. El 11 de abril de 1828 se recuerda la fundación del Fuerte Fortaleza Protectora Argentina que más tarde se denominó Bahía Blanca. La presencia de un curso de agua permanente, el arroyo Napostá Grande, fue un elemento importante para sus fundadores. Posteriormente los ranchos de adobes y sus aljibes fueron aumentando y para las necesidades de agua de la población se utilizó el agua de otros cursos de agua como el río Sauce Chico y el río Sauce Grande que nacen en el Sistema de Ventania. Sus valles comprimidos atraviesan la llanura sedimentaria y sin recibir afluentes de importancia desembocan en el estuario de Bahía Blanca. Para describir el problema de la escasez de agua en la región se transcribe un texto del diario local: “El problema del agua potable para el consumo de la población, ha sido, y sigue siendo una de las preocupaciones más serias de los que se interesan en el adelanto de Bahía Blanca. Nuestra ciudad con su sistema de pozos infectos y aljibes insalubres, disminuye muchos grados en el concepto de sus admiradores” (La Nueva provincia, 07/10/1898). En el período 1900 – 1950 se observa una importante reducción de las precipitaciones que afectan el abastecimiento de agua a la población. Desde 1910 se registra la necesidad de la utilización de los pozos surgentes termales en la localidad. Un análisis temporal muestra un avance en la solución del problema mediante la construcción del Dique Paso de Las Piedras que ayuda al aporte de agua a la ciudad de Bahía Blanca. A partir del año 1950 se observa un paulatino aumento de las precipitaciones y el tema no es abordado en la prensa escrita local, sin embargo, con las importantes sequias que se registran a partir del año 2008, el tema constituye un argumento central de esta. La población comienza a utilizar nuevamente los surgentes de aguas termales. Se presenta un análisis de la localización de las surgentes de aguas termales como solución a la escasez del agua de la ciudad desde su fundación al presente.