IBYME   02675
INSTITUTO DE BIOLOGIA Y MEDICINA EXPERIMENTAL
Unidad Ejecutora - UE
artículos
Título:
HOUSSAY´ HERITAGE
Autor/es:
SEGURA, ENRIQUE
Revista:
IEEE ENGINEERING IN MEDICINE AND BIOLOGY MAGAZINE
Editorial:
IEEE-INST ELECTRICAL ELECTRONICS ENGINEERS INC
Referencias:
Lugar: MICHIGAN (USA); Año: 2010 vol. 1 p. 19 - 19
ISSN:
0739-5175
Resumen:
Muchos argentinos, universitarios o no, amantes del conocimiento y de las ciencias, somos deudores y herederos de un compatriota egregio: Bernardo Alberto Houssay. Don Bernardo, como solían llamarlo sus amigos, discípulos y colegas, nos dejó a todos una herencia mayúscula con la creación de las principales instituciones dedicadas a la investigación científica y una escuela de Fisiología de fama internacional, verdadero orgullo de la Argentina. Sin embargo, en 1943, siendo Profesor Titular de Fisiología en la Facultad de Medicina de la UBA, fue dejado cesante por el gobierno militar de turno. Para continuar con sus trabajos de investigación fuera del Instituto de Fisiología que había creado y dirigía en la UBA, entre colegas, discípulos y benefactores , alquilaron una casa en la calle Costa Rica, en el barrio de Almagro de Buenos Aires. Allí se refugió el maestro y siguió con su brillante tarea, en condiciones de infraestructura muy modestas. Ese fue el humilde origen del IBYME ( Instituto de Biología y Medicina Experimental) y allí recibió Houssay la noticia de la obtención del Premio Nóbel en octubre de 1947. Tuvimos que esperar hasta 1959, para que otro gobierno militar, decidiera asignarle a Houssay y a su equipo de investigación, el edificio que hoy ocupa en la esquina de  Obligado y Monroe. Los diversos locales de la nueva sede fueron ocupados por los distintos grupos de investigación, asignándosele a Don Bernardo, un gran laboratorio, en la planta baja, con amplios ventanales y vista al jardín interior, dominado por una hermosa araucaria centenaria. Un año antes, en 1958, con la creación del CONICET, Houssay, designado presidente, debió dedicar la mayor parte de su tiempo a tareas de organización y dirección institucionales y, con  gran pena, concurrir mucho menos al laboratorio. Cuando alguno de sus discípulos, regresaba del exterior, después de una beca , debía tener un espacio reservado en el IBYME. Tal objetivo era prioritario para el director Houssay. Al volver de sus dos años de permanencia en Francia, en 1962, uno de los miembros del Instituto, encontró totalmente saturado el espacio y, por lo tanto, no hubiera podido reintegrarse al país. Houssay no vaciló y decidió reasignar su laboratorio a su joven colega. Ese fue el origen alejado el Laboratorio de Biología del Comportamiento. Desde el año 2005, el área remodelada del IBYME, donde subsiste el espacio en cuestión, heredada por otros investigadores, lleva el nombre de nuestro prócer de la ciencia, Don Bernardo Alberto Houssay.