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La disputa por consolidar la hegemonía empresaria sobre el sector del trabajo ha incidido en la proliferación de sofisticadas prácticas corporativas empresarias y en la movilización de variados y renovados dispositivos de control social/cultural y técnico. En este trabajo se analiza la centralidad que adquieren las lógicas de formación empresaria en el sostenimiento del orden corporativo. La agencia pedagógica articulada con el paradigma de la calidad total, sustento del nuevo orden empresarial, asume un papel protagónico en el disciplinamiento social/ laboral. Desde nuestra tesis, el dispositivo pedagógico/comunicacional, la calidad total, y el impulso de una gestión individualizada de las relaciones de trabajo articulados con otros que operan en la organización del trabajo y de la producción, vía las tecnificaciones- resultan vías fértiles para crear legitimidad y dar sostenimiento al nuevo orden empresario. Así, se constituyen en tecnologías sociales fundamentales para conformar nuevas representaciones y operar en el orden simbólico. Las áreas de Recursos Humanos, de Calidad, así como aquéllas ocupadas en las reingenierías, se configuran en enclaves codificadores, con competencia sobre la agencia simbólica y el diseño de nuevas configuraciones profesionales, cuyos rasgos centrales expresan una creciente selectividad y polarización entre los niveles inferiores y superiores de la estructura de mando. Sin embargo, las fisuras de la hegemonía empresarial, constituyen espacios potenciales para las acciones de resistencia y recomposición del accionar colectivo. Desde una perspectiva socio-educacional crítica, se analizan los agentes y agencias que asumen un papel estratégico en el diseño, transmisión y evaluación continua de los saberes corporativos en la materialidad del proceso de trabajo. Postulamos la importancia de desnaturalizar las bases doctrinales de las políticas empresarias, para lo cual resulta fundamental tomar en consideración los dispositivos que ponen en forma el sistema de control sobre el trabajo. El análisis requiere orientarse hacia los sentidos que se vehiculizan, las modalidades de codificación (identificando las agencias y agentes codificadores) y las interrelaciones que se tejen entre las formas del control simbólico y la materialidad de los procesos de trabajo. Es desde esta aproximación que se recuperan insumos fundamentales para la lucha de los trabajadores y las acciones de resistencia que impulsan. Nuestro trabajo recupera una perspectiva de análisis centralmente cualitativa y expone las principales tesis derivadas de las investigaciones realizadas en los últimos años en grandes empresas de sector automotriz, siderúrgico y en el subsector de producción de hidrocarburos.