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La toma de conciencia acerca de la relación entre trabajo y salud ha sido unproceso progresivo con avances y retrocesos, debido al desconocimiento delas autoridades, a la ignorancia, a la resistencia del sector empleador públicoy privado, y a la debilidad de las organizaciones sindicales que han asignadoprioridad a otros problemas.Primeramente, se identificó el impacto de los riesgos sobre el cuerpo, los queprovocan los accidentes que muchas veces ocasionan la muerte, como sucedecon frecuencia desde el inicio de la Revolución Industrial.Más tarde, ya en el siglo XX, y gracias a la acción de la Organización Internacionaldel Trabajo (OIT), las enfermedades profesionales se fueron reconociendoprogresivamente, cuando había evidencias de una relación directa sobre la saludy la medicina del trabajo lo confirmaba (San Juan, 2004).Desde la Memoria del Director General. Trabajo decente, en la Conferencia Internacionaldel Trabajo (OIT, 1974), y el Programa Internacional para el Mejoramientode las Condiciones de Trabajo (de Givry, 1978) se puso el acento en lascondiciones y medio ambiente de trabajo, que incluían no solo la seguridad y la higiene (accidentes y enfermedades), sino también el tiempo, el contenido y laorganización del trabajo. Recientemente, a partir de los años ochenta, gracias al esfuerzo de médicos del trabajo, ergónomos, psicólogos del trabajo, economistas y sociólogos del trabajo, se amplió el marco de referencia y, luego de costosos estudios epidemiológicos, se generalizó el concepto de riesgos psicosociales del trabajo (RPST).Este capítulo se propone analizar a grandes rasgos la evolución de la problemática de la relación trabajo-salud-enfermedad, y presentar las propuestas de los sindicatos argentinos en materia de participación de los trabajadores en la prevención de los riesgos profesionales.