CADIC   02618
CENTRO AUSTRAL DE INVESTIGACIONES CIENTIFICAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Posibles mecanismos de subducción durante el Cretácico inferior bajo los Andes Fueguinos
Autor/es:
GONZÁLEZ GUILLOT, M.; ACEVEDO, R.D. Y ESCAYOLA, M.
Lugar:
San Salvador de Jujuy
Reunión:
Congreso; XVII Congreso Geológico Argentino; 2008
Resumen:
Los Andes Fueguinos de Argentina albergan escasos cuerpos intrusivos con afinidad de arco magmático pero con características petrológicas y geoquímicas muy diferentes a las del Batolito Patagónico Austral (BPA). Los primeros constituyen cuatro plutones aislados con diferenciación extrema desde ultramafitas, gabros y dioritas hasta sienitas. La geoquímica de estas rocas es alcalina (saturada en sílice) con elevado contenido en Kp, afín con series shoshoníticas. González Guillot et al. (en prensa) las agrupan en una suite diferente bajo el nombre de Complejo de Rocas Shoshoníticas de Tierra del Fuego (CRS). El BPAconsiste principalmente en tonalitas y granodioritas (tendencia sobresaturada en sílice) calco-alcalinas, con contenido en ~O medio a bajo (p.e. Suárez et al. 1985). Las edades de los plutones del CRSabarcan un período de tiempo bastante corto (115-93 Ma), comparado con la longevidad del BPA(141-34 Ma, para los plutones al Sur del canal Beagle). Las diferencias enumeradas arriba sugieren que los mecanismos que generaron ambas suites han sido diferentes. La posición del CRSrespecto al eje de los plutones contemporáneos del BPA,de por lo menos 60 km más hacia el continente, es otro factor a tener en cuenta. Por otro lado, la edad del CRSimplica que el proceso que le dio origen ha sido de corta duración y no pudo repetirse en el tiempo. El objetivo de este trabajo, es entonces, discutir dos posibles modelos que explican la coexistencia de estas suites magmáticas. Una alternativa que satisface lo expresado arriba implica la generación de magmas en el mismo régimen subductivo, pero a distinta profundidad en el manto (modelo K-h de Dickinson 1975). Por lo tanto, los magmas del CRSse habrían generado por menor porcentaje de fusión parcial y en una fuente más profunda (González Guillot et al. 2007). En favor de este modelo, puede mencionarse el incremento de ~O en el CRSprogresivamente con la distancia a la trinchera (en roca total y hornblenda, para un mismo valor de SiOz y #Mg, respectivamente), junto con un incremento en la proporción de feldespato potásico en esta dirección. El bajo volumen del CRS, comparado con el extenso BPA,sugiere también que las condiciones para generar fusión parcial en el manto no eran tan favorables. La mayor relación (La/Y)N del CRS respecto al BPA,para un mismo valor de Si02, es igualmente sugestiva de menor porcentaje de fusión parcial para el primero, como así también una fuente más profunda, más rica en granate. Incluso, esta relación varía dentro del mismo CRS, incrementándose hacia los plutones septentrionales. El régimen tectónico durante la cristalización del CRShabría sido compresivo, como lo manifiesta la extrema diferenciación de los plutones. Los datos geobarométricos indican levantamiento cortical sincrónico con la cristalización de los cuerpos más meridionales (Túnel y POM), pero no para el Jeu-Jepén. Esto indica que este sector septentrional aún no estaba afectado por alzamiento. Este modelo llevaría el inicio de la fase Ándica, para la zona del PDM,Ushuaia y más al Sur, un poco antes de los 110 Ma, edad más antigua propuesta para la deformación (p.e. Dott etaI.1977). A -100 Ma (edad de una dacita calcoalcalina en península Ushuaia) debió haber habido un cambio en la geometría de subducción, responsable del magmatismo calcoalcalino al Norte de RV,y que en territorio argentino se superpone espacialmente al CRS. Este hecho puede indicar una horizontalización de la losa pacífica, con la subsiguiente somerización de la zona de fusión parcial. La ausencia de plutones de 100-90 Ma en el cabo de Hornos y península Hardy indican supresión del magmatismo en ese sector del arco. Este segundo episodio magmático también tuvo una duración relativamente corta. A los 84 Ma Suárez et al. (1985) encuentran una interrupción del magmatismo en todo el sector al Sur del canal Beagle. Esta interrupción también se hace notoria en el sector argentino. Este modelo pone en duda, por otro lado, la edad de una diorita del Cerro Jeu-Jepén (CRS)de 93 Ma (KI Ar roca total), la cual pudo haber sido rejuvenecida. A los 60 Ma vuelve a implantarse el magmatismo a lo largo del eje principal del arco magmático, al Sur de los remanentes de RV(Suárez et al. 1985), lo cual implica un aumento en el ángulo de subducción. La posición septentrional del CRSrespecto a RVpermite considerar una segunda alternativa para su génesis. Este sector coincide con el ancho máximo de la cuenca, de 100-230 km, aunque sus afloramientos abarcan solo -40 km (Fig. 1). La actividad ígnea en la cuenca habría cesado para los 137 Ma. ¿Es posible entonces que parte de este fondo oceánico se haya perdido por subducción? El origen del CRS podría vincularse entonces a un segundo arco magmático (distinta fuente), paralelo al BPA.En este caso, dos sistemas subductivos, paralelos, habrían sido activos en la parte alta del Cretácico inferior. Una subducción así fue propuesta por Harrison et al. (1979), aunque más tarde Cunningham (1995) y Kraemer (2003) (también insinuado por Dalziel et al. 1974) proponen una subducción reversa de RV.De todos modos, ninguno de estos autores dan evidencias claras de tal fenómeno. Nuevamente a los -100-93(?) Ma esta doble subducción tuvo que haber cesado (la colisión del arco magmático externo es evocada para este momento). Aquí la horizontalización mencionada para la losa pacífica en el modelo anterior es igualmente propuesta, y la evolución del régimen subductivo continúa de la misma manera que en aquel caso. La Formación Barros Arana (BA;Stern et al. 1991), que aHora mucho más al Norte (-52°LS, Chile), consiste en basaltos contemporáneos con el CRS, ya su vez comparte la misma tendencia shoshonítica medianamente alcalina, lo que sugiere que ambas unidades podrían ser equivalentes (González Guillot et al., en prensa). Coincidentemente estas lavas aparecen hacia el Este de donde los vestigios de RVvuelven a aflorar (Complejo Sarmiento). Esto invita una vez más a pensar que pudo haber existido una subducción hacia el continente de RV,en toda su extensión, paralela a la subducción pacífica para el período 115-100 (93?) Ma. De todos modos, los datos isotópicos tanto de BAcomo del PDMse alejan de aquellos de RV.Esta es la principal falencia que presenta este segundo modelo, por lo que con el conocimiento adquirido hasta ahora, la hipótesis 1 parece ser la más apropiada, e incluso la más simplista_