La condrita ordinaria Cerro Mesa: en el límite de la clasificación entre dos grupos.

ACEVEDO, R.D.; VALÍN, M.L.; VILLAR, M.L.

San Salvador de Jujuy

Congreso; XVII Congreso Geológico Argentino; 2008

Asociación Geológica Argentina

De las muchas condritas ordinarias caídas ó halladas en territorio argentino se han clasificado hasta el momento unas veinte del grupo L (de hipersteno y olivina) de las cuales la mitad pertenece al tipo 6. Una sola de esas condritas podrían incluirse, con dudas, en el grupo LL. Puede decirse que La Criolla es entre ellas la más conocida y estudiada (SEAN Bulletin 1985, Graham 1986, Acevedo et al. 2005) y, como contrapartida, Cerro Mesa, encontrada en 2006 y de la que se recuperaron 10,5 kg de fragmentos, en parte incorporados a la Colección McCartney Taylor y redistribuidos ya en distintas colecciones privadas, que ha recibido poca atención, al punto de no haber sido aún acreditada oficialmente en el Catálogo de Meteoritos de la Mineralogical Society. Las condritas ordinarias constituyen el conjunto más numeroso de la clasificación y se distinguen por su notable presencia de cóndrulos. El grupo L está caracterizado químicamente en base a su bajo contenido en hierro, moderado tamaño de cóndrulos (aproximadamente 0,7 mm de diámetro) y composiciones isotópicas intermedias entre los otros dos grupos, H y LL El tipo petrológico 6 designa a aquellas condritas que han sido metamorfizadas bajo condiciones de homogeneización de todos los minerales constituyentes, habiendo obliterado muchos cóndrulos, convertido los piroxenos bajos en Calcio en ortopiroxeno y producido una fase secundaria de feldespato. En el caso de la condrita La Criolla, su metamorfismo de choque es de grado S4.y su estado de alteración acuosa (weathering) es W2 (Acevedo et al. 2005). El meteorito Cerro Mesa es una condrita consistente en cóndrulos de olivina, orto y clinopiroxeno cálcico  contenidos en una matrix de grano fino de olivina, ortopiroxeno y plagioclasa, con una fase metálica de taenita-kamacita y accesorios como cloroapatita y/ó merrilita. Algunos cóndrulos son de tamaño considerable. Habiéndose analizado 33 piroxenos y 24 olivinas, sobre un total de 70 microanálisis, puede decirse que los piroxenos de los cóndrulos (21 análisis) siendo todos hipersteno empero se muestran más magnesianos que los de la mátrix (En78Fs22 frente a En77,66Fs22,33). Tres análisis de piroxenos de uno de los cóndrulos (de un piroxeno radial) resultaron clinopiroxenos cálcicos (WoEn85,66Fs14,33). Las olivinas de la mátrix (Fig. 3) tienen fórmula estructural media de Fo74,25Fa25,75. Las relaciones Fa (% mol) frente a Fs (% mol) la ubican sorprendentemente en el gap entre los límites de los grupos L y LL según las clasificaciones de Keil y Fredriksson (1964) y Dodd (1981) basadas en el incremento de sus estados de oxidación. S En el caso de la condrita La Criolla, su metamorfismo de choque es de grado S4.y su estado de alteración acuosa (weathering) es W3.