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El yacimiento argentífero Mina Martha se encuentra ubicado en el sector sudoccidental del Macizo del Deseado, a 50 km al NE de la localidad de Gobernador Gregores, provincia de Santa Cruz, Patagonia Argentina. La mina fue explotada desde el año 2001 hasta fines del 2012 por la empresa Coeur Argentina SRL, subsidiaria de Coeur d´Alene Mines Corporation (Páez, 2012). El yacimiento está formado por un sistema de vetas epitermales de sulfuración intermedia alojadas en las ignimbritas del Grupo Bahía Laura y presentan un fuerte control estructural, conformando un sistema transtensional con desplazamiento sinestral (Páez et al., 2011). Las estructuras mineralizadas presentan múltiples episodios de relleno y brechamiento, con una mineralización principalmente argentífera, con oro y metales base asociados. Posee una elevada relación Ag/Au (alrededor de 800/1), y una zona de alteración hidrotermal restringida (Páez, 2012). La mineralización está caracterizada por un total de diez pulsos mineralizantes, que pueden ser agrupados en tres grandes etapas que marcaron la evolución del depósito epitermal (Páez, 2012): una etapa hidrotermal (Pulsos P1 a P7), una etapa tectónica que removiliza los metales depositados en la etapa anterior (Pulsos P8 y P9), y una tercera etapa supergénica postmineral (Pulso P10). La evolución hidrotermal del yacimiento está dominada por una compleja asociación de sulfuros y sulfosales, a los que se asocian cantidades variables de plata nativa. El esquema paragenético de esta etapa se caracteriza por importantes variaciones en las proporciones relativas entre sulfuros y sulfosales. En líneas generales puede observarse una disminución progresiva en el contenido de sulfuros de metales base, que son reemplazados dentro de la paragénesis por una cantidad cada vez mayor de sulfosales de plata y cobre. Estos cambios en la mineralogía de la mena, son acompañados por un progresivo aumento en la participación del cuarzo y la adularia, que pasan de estar prácticamente ausentes al inicio, hasta hacerse dominantes hacia el final del evento hidrotermal (Páez, 2012). Luego del evento hidrotermal la mineralización sufrió los efectos de un evento de deformación de tipo frágil vinculado a la reactivación tectónica de las zonas de falla que contienen a algunas de las vetas. El resultado de este evento fue el desarrollo de cuerpos irregulares de brechas de falla y cataclasitas foliadas que produjeron la removilización mecánica y química de los metales depositados anteriormente, con la formación de nuevas fases minerales, contribuyendo de manera significativa en la formación de cuerpos de alta ley dentro del sistema vetiforme (Páez, 2012). Finalmente, las partes más superficiales del yacimiento están dominadas por el desarrollo de una zona de oxidación de alrededor de 20 m de potencia que es seguida en profundidad por una pequeña zona de enriquecimiento supergénico de alrededor de 20 m de potencia (Páez, 2012). Con el fin de caracterizar la mineralogía portadora de plata en los pulsos hipogénicos (P1 a P9), se realizaron un total de 134 análisis de microsonda electrónica sobre las principales fases minerales observadas en el yacimiento. La plata nativa se presenta como una fase mineral muy pura, mostrando contenidos de Ag que en general superan el 97%. Como impurezas se pudieron reconocer cantidades muy subordinadas de As, Se, Te y Bi, en contenidos que en general no superan el 0,2%. La composición de la tetraedrita (etapas hidrotermal y tectónica) varía en torno a la solución sólida entre la tetraedrita argentífera y la freibergita (Gonzalez Guillot et al., 2008), presentando en general un contenido elevado de plata y una relación Ag/(Ag+Cu) que muestra un rango variable de sustitución entre Ag y Cu. En general, los contenidos de Ag varían entre 13,7% y 33,7%, con un promedio alrededor del 25,2%, mientras que los contenidos de arsénico son muy bajos y raramente superan el 2%. La fórmula estequiométrica promedio obtenida para esta sulfosal corresponde a (Cu4,08-7,81 Ag2,22-6,25) (Zn0,35-1,50 Fe0,50-1,77) (Sb2,52-4,31 As0-1,51 Se0-0,51) S12,11-13,02. En este esquema, las tetraedritas pertenecientes a la etapa tectónica son ligeramente más argentíferas que las pertenecientes a la etapa hidrotermal. La polibasita presenta ligeras variaciones en sus contenidos de Cu, Ag y Sb, aunque en líneas generales las fórmulas son bastante homogéneas. Una característica distintiva es la presencia de contenidos elevados de selenio en el pulso P3 (polibasita selenífera; Márquez-Zavalía et al., 2008), mientras que en el pulso P4 no se registraron contenidos significativos de este elemento. Como otras impurezas se reconoció la presencia de Fe, Zn, As y Te. La fórmula estequiométrica promedio obtenida para la polibasita selenífera (P3) corresponde a (Ag17,23Cu2,04)(Sb1,02, As0,39)(S11, Se0,84), en tanto que la obtenida para las polibasitas normales corresponde a (Ag15,96Cu2,25)Sb1,72S11. La pirargirita de la etapa tectónica se caracteriza por relaciones Sb/(Sb+As) que son siempre mayores a 0,98, lo que indica que los cristales corresponden al extremo rico en Sb de la solución sólida pirargirita-proustita. De esta manera los contenidos de arsénico rara vez superan el 0,4% y como impurezas se pueden reconocer trazas de Au, Bi, Se, Cu y Zn, lo que hace que esta fase mineral sea muy homogénea en composición. La fórmula estequiométrica promedio determinada para esta sulfosal corresponde a (Ag3,17, Cu0,04)Sb1,04S3. La miargirita (etapa tectónica), al igual que la pirargirita, presenta composiciones muy homogéneas (Figura 1), que están dominadas por relaciones Sb/(Sb+As) cercanas a la unidad, en donde los contenidos de arsénico se ubican siempre por debajo de 0,4%. Adicionalmente, se observó la presencia de trazas de Cu, Pb y Bi como impurezas. La fórmula estequiométrica promedio obtenida para este mineral corresponde a Ag1,06Sb1,02S2. La freieslebenita (etapa hidrotermal) está caracterizada por una composición bastante cercana a la composición teórica de este mineral, presentando únicamente cantidades menores de Cu que pueden alcanzar valores de hasta 1,7%. La fórmula estequiométrica promedio obtenida para esta sulfosal corresponde a (Ag1,3, Cu0,09)Pb0,6Sb1,19S3. De esta manera, las altas leyes de plata observadas en Mina Martha, se pueden relacionar a la compleja mineralogía portadora de plata de este yacimiento, que se presenta principalmente en su forma nativa formando cristales de elevada pureza, o bien entra en la estructura de cinco especies diferentes de sulfosales con antimonio (polibasita, tetraedrita-freibergita, pirargirita, miargirita y freieslebenita).