CADIC   02618
CENTRO AUSTRAL DE INVESTIGACIONES CIENTIFICAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Geoarqueología y paleoambientes de la laguna Las Vueltas, Tierra del Fuego, Argentina
Autor/es:
MONTES ALEJANDRO; SANTIAGO FERNANDO; SALEMME MÓNICA; LÓPEZ RAMIRO
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; XIV Reunión Argentina de Sedimentología; 2014
Resumen:
Mediante la interpretación de imágenes satelitales, sondeos y dataciones radiocarbónicas se realizó la reconstrucción paleoambiental de la zona correspondiente a la laguna Las Vueltas, Tierra del Fuego. Las investigaciones arqueológicas en la zona de la Laguna Las Vueltas  han registrado en la costa oriental un sitio de matanza y procesamiento de guanacos (Las Vueltas 1 -LV1- S53° 37.715? O68° 01.656?; Santiago y Salemme 2010; Santiago 2013). Del mismo modo que en otras lagunas de la estepa fueguina (El  Perro, Santiago 2013; Arturo, Coronato et al. 2011; Las Marías, Oría et al. 2011; Amalia y O?Connor, Oría 2012), los materiales arqueológicos identificados se encuentran en depósitos eólicos y/o expuestos parcialmente en superficie. Mediante las dataciones radiocarbónicas de estos depósitos se obtuvieron tasas de sedimentación eólica que permiten reconocer un período de mayor aridez relativa durante el Holoceno tardío y que estaría vinculado a la denominada ?Pequeña Edad de Hielo?. Se reconoce la influencia de las variaciones climáticas y los cambios del nivel del mar que afectaron el área desde el Pleistoceno tardío hasta la actualidad. El descenso del nivel de base de las redes de drenaje, iniciado posteriormente al piso isotópico marino (marine isotope stage) 5e, hace 120 ka aproximadamente (Bard et al. 1990), habría favorecido la incisión de los cañadones en la zona de estudio, producto de la erosión hídrica. La litología friable de los sedimentos terciarios y condiciones climáticas de relativa aridez habrían contribuido al desarrollo de una red de drenaje cuya morfología se preserva parcialmente hasta la actualidad (Figura 1.a). Esta red de drenaje fue interrumpida por el desarrollo de pequeñas subcuencas de deflación, actualmente ocupadas por humedales y lagunas (Figura 1.b). Durante el UMG el nivel del mar habría alcanzado su punto más bajo (Rabassa 2008) y la zona de estudio se habría encontrado en condiciones de permafrost (Trombotto 2008) o en un ambiente de tundra cercano con la transición a la estepa, la cual ocupaba gran parte de la zona actualmente sumergida por el mar (Coronato et al. 2007; Ponce et al. 2011). Según los estudios de testigos de hielo antártico para los 19.000 años 14C A. P. el clima mundial se calentó y en respuesta a esto los grandes campos de hielo patagónicos comenzaron a retirarse (Blunier y Brook 2001). La presencia de un paleosuelo detectado a partir de un sondeo realizado en la zona, datado en 18.700 ± 520 años 14C A.P. y aún en etapa de estudio, evidencia en principio la situación subaérea del sector, y a su vez, podría asociarse a las condiciones más templadas mencionadas. Durante la máxima transgresión marina del Holoceno medio, las zonas bajas fueron invadidas por un ambiente de marisma (1.c) fechado en 6613 ±51 años 14C A.P., separado de la acción del oleaje oceánico por una barrera litoral de grava. Cuando la localidad se desvinculó de la influencia marina por el desarrollo de una extensa planicie de cordones litorales (Bujalesky 2007), se instaló un ambiente lagunar que perdura hasta la actualidad y que fluctúa en respuesta a las condiciones climáticas, al igual que el resto de las lagunas de la estepa fueguina (Villareal et al. 2014). La distribución de humedales ocupando zonas deprimidas (1.d) y la cobertura vegetal y pedológica en los depósitos eólicos indicarían condiciones relativamente húmedas, similares a las descriptas para el Optimo Climático Medieval por Favier Dubois (2003). Igualmente se reconocieron 5 ciclos de ascenso y descenso del nivel de agua en menos de 60 años, reflejando las variaciones que sufre la laguna en respuesta a las condiciones climáticas actuales.