Consideraciones para una adecuada planificación del uso del suelo en la Cuenca Superior del Río de la Reconquista

BASÍLICO, G. O.); DE CABO, L.; FAGGI, A Y CASARES, M.V.

Buenos Aires

Conferencia; Air Quality and Urban Climate in Buenos Aires; 2008

DFG y otros

Los arroyos Choza y Durazno pertenecientes a la Cuenca Superior del Río de la Reconquista desembocan en el embalse Roggero, donde se encuentra un Área Natural Protegida que lleva adelante la conservación de la flora y fauna autóctonas y gestiona algunos usos turísticos y recreativos del embalse y de las cabeceras del río. La ocupación del territorio y los usos del suelo carecen de una planificación efectiva y se han desarrollado en forma espontánea o anárquica. Como en el resto del conurbano bonaerense, el crecimiento poblacional en el área fue explosivo y desordenado. En los sistemas fluviales las variaciones estacionales de los parámetros fisico-químicos y biológicos dependen ampliamente del régimen hidrológico. La comprensión de estas relaciones permitiría evaluar la vulnerabilidad de los ecosistemas al impacto humano (Zalewski et al., 1997). La aproximación a nivel de cuenca para la comprensión de los procesos ocurridos en los cursos de agua que permite una adecuada planificación para la restauración de los mismos, ha cobrado notable importancia en los últimos años (Bohn y Kershner, 2002).  De manera que resulta de interés conocer el grado de impacto de los arroyos de la alta cuenca sobre el Río Reconquista bajo distintas condiciones hidrológicas. Se realizaron 5 campañas de muestreo, 3 en caudal base (agosto 2007; noviembre 2007; febrero 2008) y 2 en caudal mayor al base (septiembre 2007 y marzo 2008). Se determinaron sólidos suspendidos, nitratos, nitritos, amonio, o-fosfato, macroiones, pH, temperatura y conductividad en el agua superficial de tres sitios en Ao. Durazno (D1=9,6; D2=2,3 y D3=1,1 km aguas arriba de la desembocadura en el Embalse Roggero), dos en Ao. Choza (C1=3,5 y C2=2,0 km) y un sitio en Ao. Arias (A=12 km). Se estimó el caudal y se analizaron las correlaciones entre variables. Los datos se analizaron por métodos multivariados (PCA) y por comparaciones entre medianas. En relación a las medianas generales, en D3 se obtuvieron los mayores valores de SS (72 mg/l) C1 y C2 presentaron los mayores valores de amonio (2 y 0.6 mg/), nitritos (0.2 y 0.07 mg/l), y PRS (1.3 y 0.6 mg/l). En C1 y D2 se obtuvieron las mayores concentraciones de nitratos (0.3 y 0.7 mg/l) y en D1 y D2 los mayores valores de Conductividad (1695 y 1406 µS/cm). En el PCA los dos primeros factores explican más del 60% de la varianza total. Los macroiones contribuyen principalmente al primer factor y los nutrientes nitrogenados al segundo. Los muestreos en caudal base en el arroyo Choza se ubicaron en el cuadrante definido por elevadas concentraciones de nutrientes nitrogenados y macroiones y los realizados en ambos arroyos en caudal superior al base se caracterizaron por bajas concentraciones de ambas variables. C2 y D3 representan una integración de las características de los arroyos Choza y Durazno. Comparando ambos sitios se obtuvieron valores significativamente superiores de amonio, NID y PRS en C2, superando el nivel guia para la protección de la vida acuática. La conductividad y SS aumentaron mientras que nitritos, nitratos y PRS decrecieron hacia la desembocadura en condiciones de caudal base en ambos arroyos por el efecto dilutorio de las aguas del embalse en concordancia con el aumento de los caudales erogados. El amonio fue la forma nitrogenada predominante en Ao. Choza y nitratos en A. Durazno.En condiciones de caudal excedente (septiembre 2007) se observó el efecto dilutorio en ambos sitios, con caudales crecientes en las tres fechas muestreadas y valores decrecientes de CE, SS, amonio, nitratos, NID y PRS y macroiones y aumentos en sulfatos. Los flujos de las distintas variables fueron calculados para los dos arroyos en los sitios C2 y D3. Los mayores caudales fueron aportados al embalse por el Ao. Durazno en ambas condiciones de caudal.  Los mayores flujos de sulfatos y SS correspondieron a D3, mientras que los mayores flujos de NID y PRS a C2.  Los resultados permiten confirmar al Arroyo Durazno como zona de referencia de la cuenca en cuanto a calidad de aguas. C1 presentó riesgo para la protección de la vida acuática por los elevadas concentraciones de amonio y nitritos. En el arroyo Durazno, el lavado de nutrientes e iones desde la superficie de la subcuenca hacia los cauces, durante los eventos de precipitaciones (escorrentía superficial), parece ser la fuente predominante de estas sustancias. En el arroyo Choza, las principales fuentes de nitrógeno y fósforo parecen ser las descargas puntuales. Los efectos hidrológicos  del cambio en el uso de la tierra sobre el caudal y la calidad de las aguas de los cursos superficiales en las cabeceras de complejos ríos de la Pampa, como es el caso del Río de la Reconquista deben ser tenidos en cuenta a la hora de una adecuada planificación del recurso. Los procesos relacionados con la contaminación difusa resultan mucho más difíciles de controlar y comprender que los relacionados con las fuentes puntuales. La integración de los procesos que ocurren  nivel de cuenca permitirá un mejor conocimiento de las fuentes de contaminación difusa. La marcada influencia de las precipitaciones sobre la calidad de las aguas de los arroyos estudiados, promueven la necesidad de realizar muestreos en sitios específicos durante los eventos de tormentas en los programas de monitoreo de los mismos.