EUREKA – PREGUNTAS A LA CIENCIA

Miniperiodistas: estudiantes de 6º grado de La Matanza entrevistaron a científicos en Tecnópolis

Organizada por el CENPAT de Puerto Madryn, la actividad simuló una conferencia de prensa en vivo.


En el marco de las actividades que el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) está organizando en la 5ta edición de Tecnópolis, se llevó a cabo el ciclo educativo “Eureka – Preguntas a la ciencia”.

Para ello, Alejandro Cannizzaro, comunicador del Centro Nacional Patagónico (CENPAT-CONICET) viajó desde Puerto Madryn a Buenos Aires junto a Alexa Sapoznikow, responsable del área de educación; Sergio Kaminker, becario y Lic. en Sociología; y Julio Vezub, Dr. en Historia e investigador del CONICET.

Por primera vez, el equipo brindó dicha actividad fuera de Puerto Madryn y para alumnos de primaria, ya que normalmente la organizan para colegios secundarios. Las escuelas invitadas fueron la Nº18 “Bartolomé Mitre” de Aldo Bonzi y la Nº137 “José Antonio Wilde” de Villa Celina, ambas del partido de La Matanza.

¿En qué consiste Eureka? Es una conferencia de prensa en la que los alumnos le hacen todas las preguntas que quieran a un investigador. Antes de esta etapa, Alexa y Alejandro los invitan a reflexionar sobre el sentido de la investigación y cómo imaginan que es un científico: “viejo, con pelo blanco y anteojos, trabaja en un laboratorio, usa guardapolvo blanco y sus herramientas son el microscopio y el tubo de ensayo”, son las respuestas más comunes. Tras visualizar un breve video sobre el trabajo científico en el CENPAT, los alumnos logran derribar algunos mitos sobre el mundo del investigador, su vestimenta y su lugar de trabajo.

Durante esta breve capacitación, que se llevó a cabo en los establecimiento educativos antes mencionados, también se les dio a los chicos pautas para hacer buenas preguntas -las diferencias entre la pregunta cerrada, abierta y repregunta-, se les habló sobre la importancia de la divulgación y sobre los estudios puntuales de los científicos a entrevistar, en este caso Sergio Kaminker y Julio Vezub.

Las conferencias de prensa se llevaron a cabo en el Espacio de “Diálogos y Cine” del CONICET en Tecnópolis y éstas fueron algunas de las preguntas que los chicos hicieron y las respuestas de los investigadores:

Julio Vezub
-¿Cuánto tiempo te llevó ser historiador? Es una actividad que dura toda la vida, hace más de 20 años que me dedico a esto.
-¿Por qué decidiste estudiar historia? Desde muy chico me gustó la historia y los problemas relacionados con el tiempo. Descubrí mi vocación mirando documentales y series.
-¿Por qué decidiste estudiar indios y soldados? Siempre me gustó la aventura, miraba películas de vaqueros, fabricaba armas de juguete, y ese costado de mi pasado tiene que ver con historias de indios y soldados. Hoy juego profesionalmente a eso.
-¿Cuál fue tu motivación para estudiar historia? Mi mamá es arqueóloga y la acompañaba en el verano a sus campañas. A los 18 años hice el servicio militar obligatorio en Neuquén y me relacioné con soldados y jóvenes mapuches. Mi vocación viene por la curiosidad, soy preguntón y observador.
-¿Te cambió en algo ser científico? La vida es una experiencia de cambio constante.
Si no hubieras sido científico, ¿qué te hubiera gustado ser? Hacer política como una posibilidad de cambio social, ser camionero como mi abuelo y así tener más experiencias de aventura. También me hubiera gustado ser marinero, o dedicarme al arte, baile o pintura.

Sergio Kaminker
-¿Qué te inspiró a ser sociólogo? Me gustaba mucho la Ciencia Política, no sabía que era la Sociología, pero luego me di cuenta que se ajustaba a lo que quería hacer como vocación.
-¿Siempre quisiste ser sociólogo? A los 9 quería ser futbolista, a los 10-11 años mi idea era viajar, tener un hotel o estudiar idiomas; luego me di cuenta que lo que quería era mejorar las condiciones de vida de la gente
-¿Cuál fue tu primer trabajo? Trabajé en el Registro de la Propiedad del Automotor y mi primer trabajo en el campo de la investigación fue estudiar los cambios que se produjeron a raíz de la instalación del Shopping Abasto en el antiguo mercado central.
-¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión? La libertad de dedicarse a lo que a uno le gusta, conversar con la gente, ver diferentes realidades y experiencias de vida, viajar, la posibilidad de sumar tu granito de arena para transformar la sociedad.
-¿Sos feliz con los que hacés? Cuesta mucho ver el producto de lo que uno hace pero es gratificante al mismo tiempo porque podés contribuir a cambiar puntos de vista sobre un problema específico.
-¿Cómo es trabajar en el CONICET? El Consejo te brinda la oportunidad de dedicarte a la investigación, te pagan un estipendio para formarte a través de una beca.

El objetivo central de esta actividad es acercar la ciencia a los más jóvenes y que ellos mismos puedan involucrarse en ese fascinante mundo a través de sus propias preguntas.

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