CICLO DE ENTREVISTAS CONICET

“Investigando tomé conciencia de cuestiones de género”

Susana Tarantuviez tiene como objeto de estudio el teatro nacional escrito por mujeres a lo largo de la historia. Aunque hay mucho para analizar, asegura que es una temática poco abordada


La pasión por investigar la labor de las dramaturgas argentinas le llegó de la mano de la obra de la escritora Griselda Gambaro, a partir de la cual tomó conciencia sobre diversas cuestiones de género que hasta el momento no se había planteado.

¿Cuál es su tema de investigación?

Estudio el teatro argentino contemporáneo escrito por mujeres. Además de la lectura crítico-interpretativa de los textos dramáticos de dramaturgas actuales, analizo los modos de ficcionalización utilizados para representar las cuestiones de género y la relación con las condiciones socio-históricas de producción y reconocimiento de nuestras dramaturgas. Mi proyecto se llama “Dramaturgas argentinas: el género en escena”.

¿Cómo se volcó hacia esa temática?

El primer estudio abarcador que realicé sobre una dramaturga argentina fue mi tesis doctoral “Poética y ficcionalización en el teatro de Griselda Gambaro”, que me abrió el camino que sigo transitando hoy. Y la violencia contra las mujeres representada en algunas de sus obras, así como aquellos personajes femeninos que en su teatro encarnan la lucha contra el poder abusivo y la búsqueda de una subjetividad autónoma, me hicieron tomar conciencia de cuestiones de género que no me había planteado hasta ese momento. A partir de allí, fui construyendo mi labor de investigación.

¿Qué aporte en el conocimiento viene a cubrir su trabajo?

Como tantos otros temas que involucran a las mujeres, su papel en el teatro argentino es un objeto de estudio complejo y poco abordado. Pero para comprender cabalmente la evolución del teatro de las últimas décadas es necesario estudiar lo que han escrito. Mi trabajo viene a cubrir una suerte de falencia en el ámbito académico que de alguna manera es un reflejo del que sufren las dramaturgas en el ámbito editorial: si bien el corpus de teatro escrito por mujeres es abundante, en relación con sus pares varones hay menos publicado, lo cual pone en relieve la falta de apoyo editorial para las obras teatrales de autoría femenina.

¿Por qué eligió dedicarse a la investigación?

Apenas me recibí de Licenciada en Letras seguí vinculada a la facultad y descubrí que me apasionaba a la investigación. Unos años después, la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) me otorgó una beca de Iniciación en la Investigación para Graduado. Ese fue el primer estímulo institucional a mi labor como investigadora y funcionó como una legitimación que reafirmó mi elección profesional. Creo que un sistema de becas universitarias o de organismos gubernamentales es de suma importancia para los investigadores jóvenes: se trata de un reconocimiento y de una posibilidad de desarrollar un potencial que, de otra manera, podría desperdiciarse por completo.

¿Qué características personales se necesitan para hacer investigación?

Curiosidad intelectual, porque de allí surgen interrogantes; disciplina, para realizar una labor constante y sistemática; creatividad, sin la cual no haríamos más que repetir discursos ajenos; y claridad conceptual, necesaria para transmitir nuestros hallazgos y conclusiones.

La investigación científica implica elaborar hipótesis permanentemente y trabajar para probarlas o refutarlas. ¿Hay momentos de frustración en este sentido?

Cuando las hipótesis con respecto a una obra literaria no se corroboran, podemos caer en lo que Umberto Eco denomina “sobreinterpretación” y desoír los mandatos del texto. Pero eso no sería honesto. En la investigación literaria se requiere de honestidad para con uno mismo y para con el texto. Si el texto no valida nuestras conjeturas hay que aceptar que no eran el camino apropiado para llegar a la intentio operis (la “intención de la obra”, el sentido del texto) y empezar de nuevo. Pero ese nuevo punto de partida ya es un avance, porque proviene de una labor hermenéutica, y, por lo tanto, no debería vivirse como una frustración.

¿Ha observado cambios en la ciencia argentina a lo largo de su trayectoria?

En la última década se ha revalorizado la carrera del investigador científico y eso repercute positivamente en la forma de hacer ciencia. Creo que todas las producciones de un país, científicas o artísticas, están insertas en un contexto político que o bien las sostiene o las impide. Aquí la ciencia se ve alentada por un modelo que impulsa la investigación porque la considera una herramienta importante para lograr un crecimiento sostenido.

Formación profesional

Susana Tarantuviez es Doctora en Letras por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNCuyo, donde actualmente dicta clases. Se desempeña en el Instituto de Literaturas Modernas del Departamento de Letras de la mencionada facultad. También es autora de numerosos libros y numerosos artículos sobre crítica literaria.
  • Sobre Investigación
  • Susana Tarantuviez
  • Adjunto
  • Instituto de Literaturas Modernas de la Facultad de Filosofía y Letras – Universidad Nacional de Cuyo